Con el objetivo de erradicar las conductas violentas en las familias a través de la comunicación y la solución de conflictos, el Gobierno de Castilla-La Mancha ofrece el programa de Prevención y Tratamiento de la Violencia Familiar que en la provincia de Ciudad Real cuenta con dos equipos –uno fijo y otro itinerante- integrados por 9 profesionales entre educadoras y psicólogas.
Un recurso social y asistencial que la directora provincial de Bienestar Social, Prado Zúñiga, considera que es necesario dar a conocer justo hoy cuando se celebra el Día Internacional de la Familia.
Zúñiga ha indicado que “el deseo es que la violencia en cualquiera de sus expresiones no se dé nunca en el ámbito familiar, pero llegado el caso deben saber que tienen a su disposición el respaldo y la sensibilidad del Gobierno regional a través de este programa específico para pacificar y normalidad la relación”.
En este sentido, la responsable provincial de Bienestar Social ha valorado el trabajo y la experiencia de las y los profesionales en la elaboración de un protocolo que incluye las claves más operativas para la consecución de los objetivos marcados en cada caso, ya sean de forma individual, en pareja, familiar y grupal.
Indicar por último que la administración regional atendió el pasado año en la provincia de Ciudad Real a 193 familias dadas de alta en este programa de Prevención y Tratamiento de la Violencia Familiar.