En la búsqueda de nuevas oportunidades laborales y el fomento de empleo en la Sierra Norte de Guadalajara, un acontecimiento significativo ha marcado la pauta para la revitalización de la comarca a través de la formación en el sector de la hostelería. Ayer, en el marco de un proyecto conjunto entre ADEL Sierra Norte y ACCEM en Castilla-La Mancha, con el respaldo de la Junta de Comunidades, se celebró la entrega de diplomas a 23 nuevos expertos en cocina y servicios de restaurante en la Finca del Obispo de Sigüenza.
El programa de formación, dividido en dos etapas, capacitó inicialmente a 11 individuos en habilidades esenciales para el ámbito de la cocina profesional. Posteriormente, 12 participantes adicionales recibieron formación como camareros de bar y sala. Ambos cursos, que contaron con 95 horas de instrucción respectivamente, se llevaron a cabo en el idílico entorno de la Finca del Obispo, propiciando así un ambiente óptimo para el aprendizaje práctico y teórico.
Los encargados de impartir la formación fueron el chef Rubén Urbano, del Parador de Sigüenza, y Nacho Álvarez Oter, reconocido profesional en el área de servicios de camareros, quienes compartieron sus conocimientos y experiencias con un grupo de alumnos motivados por mejorar sus competencias laborales y permanecer en la región.
La ceremonia de graduación no solo representó el culmen de un esfuerzo conjunto entre las autoridades, los docentes y los estudiantes, sino que también subrayó la importancia del trabajo mancomunado para la generación de oportunidades de empleo en áreas rurales. El delegado de Agricultura en Guadalajara, Santos López Tabernero, y Braulio Carlés, responsable regional de ACCEM en Castilla-La Mancha, reforzaron el mensaje de que la formación y la inversión en el medio rural son cruciales para contrarrestar el éxodo rural y promover un modelo de desarrollo sostenible.
La inserción laboral de varios de los participantes antes de la finalización del curso destaca la relevancia de estos programas en la satisfacción de la demanda local por profesionales cualificados en hostelería. Además, la iniciativa ha propiciado un puente entre los recién capacitados y los empresarios de la región, proyectándose como un catalizador para el crecimiento económico local.
El éxito de la formación en la Sierra Norte de Guadalajara demuestra cómo la colaboración institucional, junto con un compromiso tangible por parte de los participantes y la comunidad empresarial, puede generar impactos positivos reales en la lucha contra la despoblación rural y en la promoción de la economía local a través del turismo y la hostelería.
