La localidad de Cardenete, Cuenca, se convirtió en el punto de encuentro para los amantes de la orientación durante la VI edición del Trofeo Sanochaores, que ofreció este año una propuesta innovadora: un formato de score nocturno. Diseñado tanto para los vecinos menos experimentados como para los que se aventuran en recorridos más largos, el evento reunió a cerca de 80 participantes la noche del pasado sábado.
La jornada se inició a las 20:00 horas con una sesión informativa sobre las bases de la orientación. Los organizadores presentaron a los asistentes cómo se desarrolla una prueba, desde la salida hasta la meta, pasando por el uso del sistema Sportident y la comprensión del mapa. Este enfoque didáctico buscaba no solo crear un ambiente competitivo, sino también fomentar el interés por esta modalidad deportiva entre los participantes de la localidad.
A las 21:00, tras unos minutos para definir las estrategias de recorrido, se dio la salida en masa a todas las categorías. La emoción y la adrenalina se adueñaron del evento mientras los competidores, iluminados por sus frontales, se internaban en la noche.
Conforme avanzaban las horas, los participantes comenzaron a regresar, donde se les recibió con un avituallamiento sólido y líquido. Era el momento de compartir anécdotas, risas y relatos de la prueba vivida, dejando claro que la diversión fue uno de los protagonistas de la noche. La jornada culminó con la entrega de trofeos y premios, que reconocieron a los mejores en cada una de las nueve categorías.
En el evento se premiaron diversas categorías, destacando a David Cotillas en la categoría H Senior y a Luis Parra en H Veterano, entre otros. Las familias también hicieron su parte, con Jose Luis Eslava liderando en la categoría Familiar, mientras que los locales Mariano García y Mercedes García brillaron en sus respectivas categorías.
No muy lejos de Cardenete, el II Trofeo Villa de Mahora, celebrado en Albacete, también atrajo la atención de los entusiastas de la orientación. Organizado por el Club de Mahora con colaboración del BMT Casas de Ves, el evento ofreció una actividad de promoción que incluyó un Minirogaine urbano de 45 minutos, que contó con la participación de cerca de 150 personas. Este año, la iniciativa se extendió hacia la inclusión con un recorrido de orientación diseñado para que los participantes sin discapacidad visual pudieran afrontarlo con los ojos vendados, destacando así la importancia de la accesibilidad en el deporte.
Dicha actividad, además de fomentar el deporte y la inclusión, también logró una recaudación de 500 euros destinados a la Fundación ONCE del Perro Guía, un gesto que resalta el compromiso social de los organizadores y participantes. La respuesta positiva de los asistentes, tanto en Cardenete como en Mahora, subraya el creciente interés por la orientación como deporte y su potencial para unir a comunidades en torno a valores de superación, inclusión y disfrute.
Fuente: Federación de Orientación de Castilla-La Mancha