Durante el pasado fin de semana, las carreteras de Castilla-La Mancha han sido escenario de una serie de accidentes de tráfico que han dejado un balance trágico de una persona fallecida y 22 heridas, según ha informado la Delegación del Gobierno de la región. Este recuento ha sido el resultado de 15 siniestros ocurridos a lo largo y ancho del territorio manchego.
La distribución de los accidentes y sus consecuencias varía entre las distintas provincias de la comunidad autónoma. En Albacete se registró un accidente con una persona herida de carácter leve. En Ciudad Real, se produjo un siniestro que resultó en dos personas heridas levemente.
La situación fue más grave en la provincia de Cuenca, donde se contabilizaron tres accidentes. Uno de ellos fue mortal, dejando además una víctima con heridas leves y otras cuatro también de carácter menos severo. Por su parte, en Guadalajara hubo cuatro incidentes con un total de ocho heridos leves reportados. En la provincia de Toledo, seis accidentes dieron como resultado otros tantos heridos de levedad.
En relación con las pruebas de alcoholemia llevadas a cabo durante el mismo período, se realizaron un total de 3.727 en toda la región, de las cuales 41 resultaron positivas. De estas, cuatro correspondieron a conductores jóvenes menores de 25 años.
Se llevaron a cabo 1.173 pruebas en Albacete, con un saldo de cuatro positivas, una de las cuales fue en un menor de 25 años. En Ciudad Real, de las 998 pruebas practicadas, 17 conductores dieron positivo, incluyendo a tres jóvenes menores de esa edad. Cuenca presentó nueve pruebas positivas de un total de 243, sin que ningún menor de 25 años resultara con alcoholemia positiva.
En cuanto a la provincia de Guadalajara, se efectuaron 673 pruebas, con solo una positiva y ninguna en menores de 25 años. Finalmente, en la provincia de Toledo se realizaron 640 pruebas con un total de diez positivas, ninguna de las cuales correspondió a menores de 25 años.
Este conjunto de siniestros y el número de pruebas de alcoholemia positivas, reflejan una preocupante realidad sobre la relación entre el consumo de alcohol y la conducción en las carreteras de Castilla-La Mancha. Las cifras reafirman la necesidad de continuar promoviendo la conducción responsable y de aplicar controles que aseguren la seguridad vial.