Con la llegada del frío, la humedad y el viento típicos de los meses de invierno, secar la ropa en casa se convierte en un reto en muchos hogares. Frente a esta situación común, Fersay, una empresa con más de 40 años de experiencia en el mercado de repuestos y accesorios para electrodomésticos, propone una guía para ayudar a los consumidores a decidir entre una lavadora-secadora integrada o dos máquinas independientes para las tareas de lavado y secado.
Según Noelia Carrasco, directora de marketing de Fersay, la elección entre estos dos sistemas depende de factores como el espacio disponible, la frecuencia de uso y el nivel de eficiencia energética deseado. Esta propuesta busca ofrecer un enfoque práctico y eficiente, resaltando tanto las ventajas como las limitaciones de estos electrodomésticos multifuncionales.
La guía de Fersay tiene como objetivo proporcionar a los usuarios la información necesaria para tomar decisiones informadas sobre sus electrodomésticos, reafirmando su compromiso con el confort y la eficiencia en el hogar.
Dentro de las ventajas de las lavadoras-secadoras, Fersay destaca el ahorro de espacio, ya que se puede instalar en el espacio de una lavadora tradicional, optimizando así la funcionalidad en áreas reducidas. Además, subraya la eficiencia energética de estos dispositivos modernos, especialmente los que funcionan con bomba de calor, que consumen menos energía que las alternativas tradicionales. Otro beneficio es la versatilidad, permitiendo a los usuarios elegir funciones según la temporada y ahorrando recursos y energía durante los meses más cálidos.
Sin embargo, Noelia Carrasco señala algunas desventajas de estas máquinas. La capacidad de secado puede ser una limitación, ya que para un secado eficiente se necesita menos carga de ropa, lo que puede ser inconveniente para familias numerosas. Además, la calidad del secado no siempre iguala a la de una secadora independiente, y los ciclos combinados de lavado y secado pueden durar hasta 4-5 horas. Por otro lado, el precio y las reparaciones de las lavadoras-secadoras de gama alta pueden ser más costosos y complejos que los de dos máquinas por separado.
Ante este panorama, Fersay sugiere algunos consejos prácticos para un secado eficiente. Por ejemplo, utilizar el ciclo de secado solo para prendas que son difíciles de tender o que ocupan mucho espacio, como toallas o sábanas. También recomienda usar los ciclos de lavado y secado en momentos de menor actividad doméstica, optimizando así el consumo energético y prolongando la vida útil del electrodoméstico.
Con esta guía, Fersay no solo busca brindar una solución práctica a la tradicional problemática del secado de ropa en momentos de alta humedad o en zonas costeras, sino también reforzar su papel como aliado de los consumidores en la elección de electrodomésticos adecuados para mejorar la calidad de vida en el hogar.
