En una sesión que marcó el destino económico de Talavera de la Reina para el próximo año, el Pleno Extraordinario ha dado luz verde al Presupuesto General para el ejercicio 2024, ascendiendo a 73.989.510 euros. La decisión, contando con el apoyo del Partido Popular y Vox, ha topado con la oposición del Grupo Municipal Socialista, quienes han votado en contra. El debate se ha enriquecido con la discusión y el posterior rechazo de las cuatro reclamaciones interpuestas por este último grupo, todas desestimadas por la mayoría gobernante.
El portavoz del equipo de Gobierno, Jesús García-Barroso, destacó la importancia de este nuevo presupuesto, indicando que su finalidad es la de corregir el déficit heredado de la gestión previa y establecer un control fiscal más estricto. Según García-Barroso, este presupuesto se caracteriza por su ambición en inversiones y proyecciones a futuro. El portavoz reitera que el objetivo es fortalecer la fiabilidad de los servicios públicos municipales para lograr «una gestión pública de calidad», al tiempo que se limita la capacidad de endeudamiento de la corporación municipal.
El proceso de aprobación no estuvo exento de fricciones, ya que García-Barroso señaló que las reclamaciones socialistas solo sirvieron para retrasar de manera «innecesaria» el proceso presupuestario, refiriéndose a ellas como una mera repetición de objeciones previas.
Por su parte, el Grupo Municipal Socialista ha manifestado su disconformidad con el presupuesto, calificándolo de transitorio y austero, subrayando que implica importantes recortes. Luis Enrique Hidalgo, portavoz del PSOE, expresó su preocupación ante la significativa disminución del 43% en inversión y el aumento del sueldo del alcalde en comparación con la anterior mandataria. Denunció además la reducción de la plantilla en la conocida Biblioteca Niveiro – Alfar ‘El Carmen’, que resultará en el despido de tres trabajadores.
David Moreno, portavoz del Grupo Municipal Vox, lamentó la actitud del PSOE, acusándolos de entorpecer la administración municipal con sus oposiciones y críticas, las cuales calificó de destructivas e infundadas. Moreno destacó la conformidad de su grupo con los informes técnicos que aconsejaban la desestimación de las reclamaciones socialistas y enfatizó la disposición de su partido para fomentar las inversiones que requiere la ciudad, instando al PSOE a cooperar en pos del desarrollo común.
