En la Comunidad Valenciana, el Partido Popular y Vox han llegado a un acuerdo programático de gobierno en el que se comprometen a defender «en todas las instancias la política de trasvases, como el del Tajo-Segura». Además, ambos partidos demandan la aprobación de un plan nacional del agua y un pacto por el agua que respete el derecho a este recurso esencial.
Dentro de este pacto, también se incluyen otros objetivos como eliminar la ideología de las aulas, permitir la libre elección de centro y de la lengua de enseñanza en todas las etapas educativas, erradicar la violencia intrafamiliar y establecer una oficina especializada para abordar la ocupación ilegal de viviendas.
En total, el acuerdo contempla 50 puntos que se comprometen a cumplir. Entre ellos, destacan el compromiso de poner en conocimiento de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado los posibles casos de inmigración ilegal, prestando especial atención a las mafias organizadas.
Otros compromisos incluyen la derogación de normas que atenten contra la reconciliación en los asuntos históricos, la eliminación de la tasa turística, la supresión de organismos considerados «innecesarios» y el impulso de un modelo de radio y televisión pública que sea acorde a la situación económica y emita contenidos que reflejen la pluralidad de la sociedad valenciana, fomentando la concordia y respetando los valores institucionales.
