El juicio contra A.G.S., el acusado del asesinato de María Isabel de la Rosa, ha comenzado con el jurado popular ya constituido. La sesión tuvo lugar en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Albacete, con un jurado compuesto por 9 titulares, de los cuales cinco son hombres y cuatro mujeres, y dos suplentes, uno hombre y una mujer. Cuatro miembros del jurado son de Albacete capital, y los demás son vecinos de Yeste, Villarrobledo, Almansa, Chinchilla y El Bonillo. Durante el juicio, las partes han explicado a los miembros del jurado cuál es su función y han expuesto los hechos que se juzgarán.
Desde el Ministerio Fiscal, así como las acusaciones particulares, han señalado que lo ocurrido el 19 de agosto de 2021 constituye un caso de asesinato, y piden la pena de prisión permanente revisable. Por otro lado, la defensa mantiene que se trata de un homicidio y ha pedido que se tengan en cuenta los atenuantes de arrebato y obcecación, así como la confesión y arrepentimiento del acusado, quien admitió los hechos el mismo día que fue detenido. En este sentido, el abogado de la defensa solicita una rebaja de la pena, dejándola en 10 años de prisión.
Según el escrito de acusación, los hechos tuvieron lugar cuando el acusado, aprovechando una relación de amistad con la víctima, la invitó a su casa para pagarle unos cupones que le debía e invitarla a una cerveza. Una vez allí, le pagó los 50 euros que le debía y le pidió que abriera unos cupones que había llevado. Tras acumular más de 200 euros, María Isabel le pidió que le pagara, lo que desencadenó una discusión. A.G.S. empujó a la víctima, quien sufrió una caída debido a sus problemas de movilidad. El acusado se abalanzó sobre ella, sujetándola por los brazos y apretándole el cuello durante varios minutos hasta asfixiarla.
Después de comprobar que estaba muerta, A.G.S. envolvió el cadáver en plásticos y lo trasladó a una de las habitaciones de la casa. Días después, mientras los familiares de María Isabel la buscaban, el acusado encargó materiales de construcción con los que construyó un muro tras el que escondió el cuerpo. Además, el acusado se quedó con los 50 euros que le pagó a la víctima, así como los cupones y el dinero en efectivo que tenía encima, por un valor total de 1.917 euros.
María Isabel tenía 44 años y vivía en Albacete con sus padres y sus hermanos. Sufría de hemiplejia derecha por parálisis cerebral mixta de etiología sufrimiento fetal y una inteligencia límite por parálisis cerebral en forma hemipléjica de etiología no filiada, y tenía reconocida una minusvalía del 70%.
El juicio continuará con la declaración del acusado.
