Toledo, 20 de septiembre de 2017.- El director provincial de Bienestar Social, Gregorio Gómez, ha puesto en valor “la importante labor” que realizan los profesionales del Centro de Menores ‘El Olivar’ que está ubicado en la comarca toledana de La Sagra y se ocupa de facilitar la reinserción social, educativa y personal de jóvenes de entre 14 y 21 años de la provincia de Toledo que se encuentran bajo medidas judiciales por la comisión de algún tipo de delito.
Gregorio Gómez ha realizado una visita a este centro gestionado por la entidad sin ánimo de lucro ‘Sistema’, que cuenta con seis plazas conveniadas con la Consejería de Bienestar Social, para mantener una reunión de coordinación con dichos profesionales y conocer de primera mano el día a día de las tareas socioeducativas que desarrollan los jóvenes que están cumpliendo en este centro las medidas en régimen abierto y de permanencia en fin de semana, que les ha sido impuestas por el juez de Menores.
Los adolescentes y jóvenes que son atendidos en el Centro ‘El Olivar’, en su mayoría por problemas de violencia filio-parental o maltrato contra sus padres, tienen en común la dificultad para desenvolverse de forma socialmente adecuada en su propio entorno, bien por problemas de convivencia en su familia o por la ausencia de control efectivo, por lo que necesitan un ambiente educativo con una mayor supervisión.
La intervención que se realiza en el centro con estos chicos es llevada a cabo por educadores sociales que, “además de enseñarles esas mínimas normas necesarias para la convivencia, les proporcionan herramientas y competencias de forma individualizada para que puedan alcanzar mejores cotas de autocontrol, autonomía y responsabilidad”, según explicaba el director provincial.
Asimismo, se trabaja en un contexto de convivencia estructurado donde se interviene socioeducativamente y los jóvenes están integrados en los distintos recursos y dispositivos educativos y sociales con los que se cuenta en la comunidad, abogando por una inclusión plena de estos menores que, circunstancialmente, cuentan de cierta restricción en sus libertades.
De este modo, la totalidad de las actividades que se realizan dentro del centro están diseñadas para que, llegado el momento, estos menores y jóvenes las puedan desarrollar diariamente fuera del mismo, favoreciendo que no vuelvan a reincidir en sus comportamientos conflictivos y que logren desenvolverse en su vida cotidiana con mayores garantías de éxito.
Durante la visita, Gregorio Gómez junto con funcionarios de la Dirección Provincial han mantenido también una reunión de coordinación con trabajadores y responsables de la entidad ‘Sistema’ encargada ejecutar dichas medidas.
Desde la Dirección Provincial de Bienestar Social, el año pasado se atendió a cerca de 500 menores, que contaban con medidas judiciales impuestas, a través de los distintos servicios de atención a familias y menores, así como de las entidades sin ánimo de lucro que trabajan en la provincia en estos programas de intervención, mediante convenios con el Gobierno regional.