Campillo de Altobuey (Cuenca), 26 de febrero de 2018.- La consejera de Fomento, Agustina García Élez, ha sostenido que “no hay mayor derroche que hacer una obra y dejarla a medias, y que ello suponga un nuevo incremento en los presupuestos”. Por eso, ha defendido que “hay que acabar lo que está iniciado y dotarlo de contenido, el Gobierno regional lo tiene muy claro”, porque las viviendas tienen que “ser el hogar de vecinos que lo están demandando desde hace muchos años y el Gobierno de García-Page viene a hacer justicia”.
Así se ha pronunciado la titular de Fomento del Gobierno de Castilla-La Mancha durante la visita a la promoción de ocho viviendas de promoción pública que fueron paralizadas en 2012 después de que su construcción se iniciara en 2009. “Después de saber que iban a contar con unas viviendas y estaba en sus planes de vida, incluso ya contaban con contratos y la garantía de que ese hogar iba a llegar, fíjense lo que suponía para estas familias la paralización de esas obras por el Ejecutivo anterior”, ha remarcado García Élez.
En esta visita, y después de conocer el funcionamiento de la Estación de Tratamiento de Agua Potable (ETAP), la consejera ha estado acompañada por el alcalde, Francisco López López; el director general de Vivienda y Urbanismo, José Antonio Carrillo; el presidente de la empresa pública de Gestión de Infraestructuras de Castilla-La Mancha (GICAMAN), Javier Barrado; y el director gerente de la Agencia del Agua de Castilla-La Mancha, Antonio Luengo.
En este sentido, Agustina García Élez ha añadido que “el Gobierno de García-Page lo tenía claro desde el inicio de legislatura y así se comprometió en el Debate del Estado de la Región a terminar las obras que estaban en paralización, dando un giro radical a lo que se estaba haciendo en política de vivienda”.
Cuando se paralizaron las obras de estas viviendas ya estaban ejecutadas en un 64 por ciento, cuando se habían invertido más de 400.000 euros (407.875) y, ahora, para terminarla será necesaria la inversión de algo más de 350.000 euros (356.125). La paralización ha supuesto un incremento del 57 por ciento del coste de la obra pendiente. “Este Gobierno busca siempre la eficiencia en el gasto, porque paralizar las obras siempre sale caro”.
Las obras en estos ocho inmuebles se están desarrollando según lo previsto, ya que el compromiso es entregar las viviendas en mayo de este año, a los 14 meses desde la firma del contrato de arras.
Las ocho viviendas de promoción pública de Campillo de Altobuey tienen tres dormitorios salón-comedor, cocina, dos baños, trastero, garaje y patio posterior; y una de ellas es adaptada para personas con discapacidad. Las obras en estas viviendas se iniciaron en 2009 y en 2012 se decidió su paralización. Actualmente se han retomado para la finalización total de la promoción.
Ha sido necesario llevar a cabo un nuevo proceso de adjudicación entre las personas actualmente inscritas en el Registro de Demandantes de Viviendas que cumplían los requisitos, pues las que en su día las solicitaron habían renunciado o ya disponían de una vivienda.
El regidor de Campillo ha subrayado que “tras 5 años paradas, estas viviendas serán ocupadas por 8 familias jóvenes del municipio que están deseando vivir cuando antes”, por lo que ha trasladado su “agradecimiento a García-Page, porque en estos más de dos años de Gobierno se nota el cambio y estamos agradecidos de que esto sea una realidad”.