El Gobierno de Castilla-La Mancha celebró un curso de uso del desfibrilador para voluntarios de Protección Civil en Ciudad Real

La Escuela de Protección Ciudadana del Gobierno de Castilla-La Mancha impartió el fin de semana en Ciudad Real un curso de reciclaje sobre el uso del desfibrilador para voluntarios de las agrupaciones de Protección Civil de la provincia.

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El objetivo fundamental del curso, en donde participaron 21 voluntarios de las agrupaciones de Campo de Criptana, Ciudad Real, Daimiel, Miguelturra, Pedro Muñoz, Tomelloso y Villarrubia de los Ojos, es facilitar la renovación de la acreditación que les habilita para utilizar el desfibrilador, que tiene una validez de dos años.

El delegado de la Consejería de Hacienda y Administraciones Públicas en Ciudad Real, Francisco Pérez Alonso, se encargó de la bienvenida a los alumnos en nombre del Gobierno de Castilla-La Mancha, intervención en la que destacó que para las agrupaciones es muy importante contar con personal especializado capaz de utilizar de manera adecuada un desfibrilador para revertir un paro cardíaco.

Pérez Alonso, que asistió a la inauguración del curso junto al técnico de Protección Ciudadana Antonio Sánchez, aprovechó la ocasión y agradeció a los voluntarios su altruismo y solidaridad y su voluntad de servicio a la ciudadanía, que se puso todavía más de manifiesto en los meses más duros del confinamiento.

Al respecto, el delegado recordó el apoyo que se está dando desde el Gobierno de Emiliano García-Page a las agrupaciones locales de Protección Civil, que además de en formación, se traduce en subvenciones para dotarlas de uniformidad, equipos y material por más de 1,3 millones de euros en los últimos 5 años.

El curso fue celebrado en el aula de formación de la Agrupación de Ciudad Real y es uno de los siete que se habían programado para impartir a lo largo del año en las capitales de provincia dentro del Plan General de Formación diseñado por la Escuela de Protección Ciudadana de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha para evitar que los alumnos deban desplazarse a Toledo.

Este año están programados un total de 41 cursos por los que se prevé que pasarán más de 1.300 voluntarios.

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