La Concejalía de Igualdad del Ayuntamiento de Ciudad Real en colaboración con la entidad social Multiángulo están llevando cabo un estudio sobre el impacto social de la COVID-19 en el municipio de Ciudad Real. “El objetivo es conocer la incidencia de la pandemia para identificar nuevas medidas que nos permitan incrementar la eficacia de las actuaciones municipales como respuesta a nuestro compromiso de minimizar el impacto social de la actual crisis sanitaria”, destacaba la concejala de Igualdad Ana Belén Chacón, durante la presentación realizada esta mañana.
La Concejalía de Igualdad del Ayuntamiento de Ciudad Real en colaboración con la entidad social Multiángulo están llevando cabo un estudio sobre el impacto social de la COVID-19 en el municipio de Ciudad Real. “El objetivo es conocer la incidencia de la pandemia para identificar nuevas medidas que nos permitan incrementar la eficacia de las actuaciones municipales como respuesta a nuestro compromiso de minimizar el impacto social de la actual crisis sanitaria”, destacaba la concejala de Igualdad Ana Belén Chacón, durante la presentación realizada esta mañana.
Una iniciativa que nace como propuesta del Consejo Local de la Mujer, y que tiene como objetivos específicos “estudiar la prevalencia de desequilibrios y brechas en la función de género, cómo afecta el status económico de la población para acceder al mercado laboral, así como conocer cambios en los estilos de vida, estados emocionales, relaciones familiares, violencia de género, etc”.
El fin es claramente “conocer el impacto que la pandemia está teniendo en los distintos ámbitos de la vida tanto personal como comunitaria”, destacaba el responsable del estudio, el sociólogo Alberto Hervás. A nivel metodológico se va a trabajar desde tres puntos de vista, según explicó. En primer lugar analizando los datos estadísticos oficiales en el ámbito del empleo y el ámbito de la pandemia en la población municipal, “fundamentalmente teniendo como referencias el Servicio Público de Empleo, y a nivel sanitario el Instituto Nacional de Epidemiología y el Ministerio de Sanidad”.
Una segunda fase gira en torno a una encuesta dirigida a toda la población, tanto de la capital como de las pedanías, “para conocer sus formas de vida y cómo están viviendo y les está afectando esta situación”. Una encuesta que se puede realizar ya a través de un código QR que se facilitará en redes sociales, así como de forma directa, y que se espera llegue a más de 400 personas, con un margen de error de un 5%.
La última fase tendrá en cuenta la voz de líderes de opinión, “todas aquellas instituciones tanto públicas como privadas que están trabajando con la población que demanda servicios municipales, para así conocer cuáles son las principales necesidades, qué servicios se echan en falta y qué medidas se deben implementar”.
Ana Belén Chacón animaba a los ciudadanos a participar. “Solicitamos la colaboración de toda la ciudadanía, cuantos más vecinos participen de la encuesta mejor porque cuantos más datos tengamos obtendremos un muestreo mayor y más exacto será el estudio”. Y en base a los resultados, “poder fijar unos objetivos sobre donde podemos mejorar, qué áreas hay que reforzar, en definitiva conocer lo que la sociedad nos está demandando”.