La organización catalana Obertament presentó recientemente un informe que revela el estigma y los problemas de salud mental en el ámbito laboral en Cataluña. Este informe se realizó a través de encuestas a empresas y trabajadores, y arrojó datos preocupantes.
En primer lugar, el informe señala que solo el 34% de los trabajadores encuestados sabe qué es el estigma en salud mental y cómo afecta al ámbito laboral. Además, el 40% de los encuestados considera que su estado actual de salud mental es malo o regular. Estos datos evidencian la necesidad de abordar este problema y generar conciencia al respecto.
El estigma es una realidad preocupante en las organizaciones, ya que el 52% de los trabajadores que han faltado al trabajo por problemas de salud mental han ocultado la verdadera razón de su ausencia. Esto indica que existe aún un gran temor al juicio y la discriminación por parte de los empleadores y compañeros de trabajo.
El informe también revela que la actitud de las empresas condiciona la forma en que se aborda la salud mental en el trabajo. El 50% de las pequeñas y medianas empresas considera que los jefes son más accesibles para hablar de este tema, mientras que en las grandes empresas solo un 29% piensa lo mismo.
Es preocupante también que el 90% de las personas que han experimentado problemas de salud mental no se sienten capaces de hablar abiertamente en el trabajo. Esto pone de manifiesto la necesidad de crear un entorno laboral saludable y seguro, donde los empleados se sientan cómodos para expresar sus dificultades y recibir apoyo.
La discriminación por razones de salud mental también es un problema latente, ya que el 45% de los trabajadores cree que una persona con este tipo de problemas sería tratada injustamente y discriminada en su trabajo. Esto demuestra la falta de comprensión y empatía hacia las personas que sufren de estas condiciones.
Otro dato alarmante es que el 60% de los trabajadores que han pasado por problemas de salud mental no han dejado de trabajar, lo que indica una cultura de presentismo y la falta de apoyo para tomarse un descanso cuando se necesita.
A pesar de que el 76% de las empresas afirma preocuparse por la salud mental, solo el 47% de los empleados y el 38% de las personas con problemas de salud mental sienten que la empresa se compromete realmente con este tema. Esto pone de relieve la necesidad de que las empresas tomen medidas concretas para abordar este problema y brindar apoyo a sus empleados.
En cuanto a la visión de género, el informe revela que el 14% de las mujeres con problemas de salud mental son tratadas injustamente de forma habitual, frente al 8% de los hombres. Esto indica que las mujeres pueden enfrentar aún mayores obstáculos y discriminación en el ámbito laboral debido a su condición mental.
Ante estas conclusiones, Obertament ha lanzado la campaña «Hi Guanyem Tots» (Ganamos Todos) con el objetivo de reducir el estigma y mejorar la cultura empresarial en relación a la salud mental. Esta campaña incluye entrevistas a activistas y expertos, así como la creación de una página web donde las empresas y los trabajadores pueden obtener más información y buscar soluciones prácticas.
En conclusión, este informe pone de manifiesto la necesidad de abordar el estigma y los problemas de salud mental en el ámbito laboral. Las empresas deben asumir su responsabilidad y tomar medidas para crear un entorno laboral saludable y seguro, donde los empleados se sientan cómodos para hablar abiertamente de sus dificultades y recibir el apoyo necesario. Solo así se podrá mejorar la calidad de vida de los trabajadores y promover un mayor bienestar en la sociedad en general.