La cadena española de helado tradicional Ebbany, una marca que pertenece al fabricante murciano Roencar, ha dado a conocer su más reciente serie de innovaciones destinadas a revolucionar el mercado, abarcando tanto el segmento retail (supermercados) como el horeca (hoteles, restaurantes y cafeterías). Los nuevos productos prometen proporcionar una experiencia gastronómica única y divertida para los consumidores, gracias a una interesante mezcla de sabores y texturas.
La novedosa gama incluye propuestas tan originales como el helado de nube con salsa de nube Marshmallow, el helado de chicle con salsa de chicle, así como opciones más clásicas pero con un twist, como el helado de cereza con salsa de chocolate, el de pistacho con salsa de dulce de leche, el de tarta de queso con salsa de fresa y el de crema catalana con salsa de caramelo. Esta amplia variedad no solo enriquece la oferta de Ebbany, sino que también está diseñada para satisfacer los paladares más diversos.
Especialmente pensando en el canal retail, el fabricante ha introducido nuevas tarrinas de 500 ml, que estarán disponibles bajo las marcas de distribuidor (MDD). Esta estrategia permite que los productos de Ebbany puedan comercializarse bajo marcas propias de minoristas, extendiendo su presencia a un espectro más amplio de clientes y situaciones de consumo. Para el mercado horeca, Ebbany ha desarrollado nuevos formatos en tamaños de 2.9, 5.5 y 6 litros, ideales para satisfacer la demanda de volúmenes más grandes sin sacrificar la calidad del producto.
Estas innovaciones son el resultado del empeño y la visión de la quinta generación de la familia propietaria de Roencar, compañía que lleva más de 75 años dedicada a la creación de helado artesanal. Esta nueva generación ha jugado un papel clave no solo en el desarrollo de productos, sino también en la expansión de la marca a nivel internacional, alcanzando mercados en países como Arabia Saudita, Jordania, Kuwait, Vietnam y Corea del Sur.
El compromiso de la empresa con la calidad y la innovación se refleja en el trabajo de su departamento de I+D y Calidad, que sigue estrictos protocolos certificados por el sello IFS, asegurando que los procesos de producción cumplan con los estándares más elevados de seguridad alimentaria. Además, la inclusión de certificaciones Halal amplía la accesibilidad de sus productos a una mayor variedad de consumidores a nivel mundial.
Para apoyar este crecimiento e innovación constantes, Roencar dispone de instalaciones modernas y amplias, con más de 7.500 metros cuadrados, en Alcantarilla (Murcia). La reinversión en el negocio, particularmente en el área de I+D+i, es una constante, con el objetivo de seguir presentando al mercado productos diferenciales e innovadores que reflejen los valores medioambientales y de responsabilidad social corporativa de la empresa.
