Los problemas urológicos a menudo se presentan de manera repentina y pueden requerir atención médica urgente. Entre las causas más comunes de consulta urgente en el ámbito urológico se encuentran el cólico renal severo, la hiperplasia benigna de próstata en etapas avanzadas, el aumento del Antígeno Prostático Específico (PSA) y el cáncer de próstata. Alejandro González, urólogo de la Policlínica Gipuzkoa, nos ofrece una visión sobre cómo se están manejando estos casos con las últimas tecnologías en urología.
El cólico renal, uno de los trastornos más comunes, involucra un dolor intenso causado por un cálculo en la vía urinaria. Este dolor, a veces acompañado de fiebre y sangrado al orinar, puede ser extremadamente incómodo y requiere intervención inmediata. Gracias a técnicas avanzadas como la ureterorrenoscopia con láser, los cálculos pueden ser fragmentados y extraídos de manera mínimamente invasiva, lo que acorta el tiempo de recuperación.
Un PSA elevado es otro motivo habitual de consulta, aunque no siempre indica cáncer de próstata. En casos de PSA alto, se recomienda repetir la prueba en un periodo de cuatro a seis semanas para descartar variaciones transitorias. Si los niveles permanecen elevados, la resonancia de próstata puede detectar áreas sospechosas, seguido de una biopsia por fusión para una evaluación más precisa.
El cáncer de próstata, siendo el tumor más diagnosticado entre los hombres en España, con 33.769 nuevos casos y 6.011 fallecimientos en 2023, requiere atención especializada. La terapia focal para los tumores localizados en pequeñas áreas de la próstata es una opción que minimiza los efectos secundarios y acorta considerablemente el tiempo de hospitalización. En situaciones donde el cáncer está más extendido, se opta por la extirpación completa a través de la prostatectomía radical con el robot quirúrgico Da Vinci X, que destaca por su precisión milimétrica y su capacidad para reducir complicaciones.
La hiperplasia benigna de próstata, otro motivo común de consulta, generalmente se maneja con medicación, pero puede requerir cirugía si los síntomas persisten o se complican. La técnica HoLEP, una cirugía láser mínimamente invasiva, permite la extracción del tejido prostático con una recuperación muy rápida, generalmente dando el alta a los pacientes en menos de 48 horas y sin sondajes prolongados.
El Dr. Alejandro González, con su experiencia en la aplicación de estas avanzadas tecnologías, destaca la importancia de un enfoque moderno y eficaz para abordar las urgencias urológicas en la actualidad. Su dedicación a la utilización de las técnicas más innovadoras está contribuyendo a mejorar notablemente la calidad de vida de los pacientes en la Policlínica Gipuzkoa.