La Casa Blanca ha emitido una directiva que redefine la política exterior de los Estados Unidos, enfocándola en el principio de «América Primero». Desde la toma de posesión, el nuevo presidente ha dejado claro que su administración priorizará los intereses estadounidenses en todas las decisiones internacionales, estableciendo un marco que busca alinear todas las operaciones del Departamento de Estado con esta filosofía.
De acuerdo con las disposiciones de este nuevo enfoque, el Secretario de Estado tiene la responsabilidad de implementar esta política a la brevedad. Esto implica no solo ajustar las directrices existentes, sino también reestructurar programas y personal para reflejar esta nueva dirección que coloca a América y a sus ciudadanos en el centro de la política exterior.
El anuncio también detalla que esta directiva no obstruye el poder y las funciones legales de diferentes departamentos o agencias, lo que sugiere un intento de coordinar esfuerzos sin interrumpir la maquinaria del gobierno federal. Además, se ha mencionado que los lineamientos se llevarán a cabo dentro del marco legal y contarán con las apropiaciones disponibles, asegurando que su implementación sea factible dentro de los límites presupuestarios.
El documento destaca que no se crean derechos o ventajas exigibles a través de acciones legales, lo que implica un enfoque limitado y regulado de la política pública en el ámbito internacional. Este aspecto ha sido recibido con escepticismo por algunos analistas, que advierten sobre un potencial desdén por compromisos previos de Estados Unidos en el ámbito global.
Con esta orden emitida el 20 de enero de 2025, la administración busca dejar claro su compromiso con un enfoque proteccionista en la política exterior. A medida que se desenvuelven estas políticas, el impacto en las relaciones internacionales y en la percepción de Estados Unidos en el mundo será objeto de atención crítica. La estrategia «América Primero» promete ser un tema central que definirá la narrativa internacional de la nueva administración y su legado en las relaciones exteriores.
Fuente: WhiteHouse.gov
