El Sistema Nacional de Salud (SNS) se destaca como el principal proveedor de atención en el parto en España, atendiendo a 8 de cada 10 partos en el país. Según el Informe del SNS de 2023, publicado por el Ministerio de Sanidad este lunes, la tasa de cesáreas en los hospitales del SNS fue del 22,4% en 2022. Esta cifra contrasta con la tasa de cesáreas del sector privado, que atiende al 18,6% de los partos y presenta una tasa del 34,5%.
Particularmente en Castilla-La Mancha, las tasas de cesáreas en los centros públicos alcanzaron el 25,4%, mientras que en los privados se registró un 36,5%. A nivel nacional, la relación de partos vaginales frente a cesáreas fue de 3,5 en hospitales del SNS, en comparación con una ratio de 1,9 en los privados. En términos absolutos, el SNS reporta 203.251 partos vaginales frente a 58.740 cesáreas, y los hospitales privados contabilizan 39.145 partos vaginales y 20.624 cesáreas.
Desde 2012, las tasas de cesáreas en el SNS han permanecido estables, mientras que en el sector privado ha habido una ligera disminución del 3,01% en los últimos diez años. En relación con otros países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), España ocupa el decimotercer lugar en la realización de cesáreas, con una tasa de 242,2 procedimientos por cada 1.000 nacidos vivos.
El informe también desglosa las tasas de cesáreas por Comunidades Autónomas, siendo algunas de ellas Andalucía con un 23,8% en hospitales del SNS y 34% en privados, Aragón con 18% y 29,5% respectivamente, y Madrid con 20,8% en el sector público y 30,7% en el privado. Ceuta y Melilla reportan que el 23,5% de las cesáreas son realizadas por el SNS.
En cuanto a la seguridad y calidad de la atención perinatal, el informe destaca un incremento en la incidencia de trauma obstétrico en los últimos diez años. El 1,05% de los partos vaginales no instrumentados en el SNS en 2022 han sufrido este trauma, mientras que los partos vaginales instrumentados han tenido una incidencia del 5,29%.
Estos porcentajes son importantes indicadores de resultados y seguridad, ya que una incidencia elevada de desgarros perineales graves puede reflejar deficiencias en la asistencia al parto. España registra un porcentaje intermedio en comparación con otros 16 miembros de la OCDE.
Finalmente, el informe señala que en 2022 se indujo el 27,5% de los 203.251 partos vaginales atendidos en hospitales del SNS, destacando un incremento del 61,8% desde 2016. El Ministerio de Sanidad recuerda que la inducción al parto conlleva riesgos y debe realizarse bajo indicación obstétrica adecuada.
