La Guardia Civil de la localidad de Bogarra ha investigado a un individuo, de 51 años de edad, por su implicación en un presunto delito de estafa. El modus operandi del sospechoso consistía en el uso de una página web de venta de coches de segunda mano para engañar a los compradores.
El hecho que desencadenó la investigación sucedió cuando una persona de Bogarra denunció haber adquirido un vehículo a través de Internet por el cual pagó 1.200 euros como señal, pero después de esperar un tiempo más que suficiente, no recibió ni el coche ni algún tipo de comunicación del vendedor. Este pago representaba la mitad del costo total del vehículo, acordándose que la otra mitad sería entregada al obtener el coche.
A raíz de estas prácticas, la Guardia Civil descubrió que el hombre había engañado a su víctima falsificando el anuncio de venta. El investigado había entablado comunicación previa con propietarios que sí publicaban anuncios legítimos y, mediante aplicaciones de mensajería instantánea, obtenía vídeos, imágenes y copias de documentación que le servían para elaborar anuncios fraudulentos. Los anuncios falsos eran insertados en diversas plataformas en línea destinadas a la compraventa de vehículos, logrando atraer la atención de incautos compradores.
Los investigadores también revelaron que el detenido, con una estrategia similar, había logrado estafar al menos a otras cuatro personas, residenciadas en provincias tan variadas como Cádiz, Granada, Madrid y Sevilla. En todos los casos, el individuo presionó a las víctimas para que las transferencias de dinero se ejecutaran de manera inmediata, lo que garantizaba que los fondos se acreditaran en su cuenta bancaria en cuestión de segundos.
Este no era el primer episodio delictivo para el individuo investigado, quien contaba con antecedentes por acciones semejantes. Las diligencias dirigidas por la Guardia Civil de Bogarra han culminado y el caso ahora ha pasado a manos del Juzgado de Instrucción Número 1 de Hellín, que se encontraba de guardia, esperando así determinar la responsabilidad del acusado en los delitos que se le imputan. La actuación ejemplar de la Guardia Civil refleja su compromiso con la lucha contra los delitos cibernéticos y la protección de los derechos de los consumidores.
