La temporada navideña ofrece una ocasión perfecta para explorar Estados Unidos, donde la diversidad de actividades y escenarios festivos se despliega como en ningún otro lugar. Desde brillantes despliegues de luces hasta vibrantes mercados navideños, el país norteamericano se transforma en un escaparate de tradiciones y celebraciones únicas que capturan el espíritu de la Navidad en cada rincón.
En el noreste, el deslumbrante árbol de Navidad del Rockefeller Center en Nueva York se erige como un emblema ineludible. La ciudad de los rascacielos también alberga espectáculos icónicos como «El Cascanueces» del New York City Ballet y el «Christmas Spectacular» de Radio City Rockettes. Para aquellos que buscan una experiencia cultural rica, el Metropolitan Museum of Art ofrece un belén barroco napolitano, mientras que las festividades de Hanukkah se iluminan con una imponente menorá en la Quinta Avenida.
Washington D.C. brilla con el árbol nacional de Navidad y la Menorá nacional en la Elipse de la Casa Blanca, complementando su ambiente festivo con las ZooLights en el Zoológico Nacional. Para las compras, el DowntownDC Holiday Market es un destino imperdible.
Virginia, con su Colonial Williamsburg, ofrece una inmersión histórica en las celebraciones navideñas de la América primitiva, mientras que Vermont cautiva con sus pintorescos pueblos que ofrecen desde esquí hasta acogedoras veladas junto a la chimenea.
El medio oeste no se queda atrás, con Santa Claus, Indiana, que encanta con actividades temáticas, y Chicago, donde el Christkindlmarket y el Griffin Museum of Science and Industry celebran las festividades de manera espectacular.
El sur y el sudeste también emanan calidez navideña. En Nueva Orleans, el NOLA ChristmasFest se destaca con sus festividades criollas, mientras que Asheville en Carolina del Norte y Florida, con sus coloridos desfiles de barcos, se suman al alegre bullicio.
En el oeste, Denver sorprende con el Mile High Drone Show y Albuquerque en Nuevo México, con su tradicional tour de luminarias. Mientras tanto, Los Ángeles ilumina su luna navideña con desfiles y espectáculos de luces.
Hawái ofrece una navidad tropical con espectáculos de hula, y Puerto Rico cierra el círculo con la temporada navideña más larga de Estados Unidos, extendiéndose hasta enero con el Festival de San Sebastián.
Cada una de estas regiones ofrece una experiencia única, mostrando la diversidad cultural y el espíritu festivo que caracterizan a Estados Unidos durante la Navidad. Una época que promete alegría, asombro y la oportunidad de crear recuerdos inolvidables en cualquiera de sus múltiples destinos.