El reciente informe del Índice de Precios de Consumo (IPC) ha llevado a Comisiones Obreras de Castilla-La Mancha a reiterar su demanda a las patronales. La organización sindical subraya la urgencia de incrementar los salarios de los trabajadores y trabajadoras, una medida que se considera esencial para enfrentarse al creciente coste de la vida, principalmente en lo que respecta a los bienes y productos de primera necesidad.
La inflación continúa ejerciendo presión sobre la economía doméstica, afectando de manera directa la capacidad adquisitiva de las familias. Ante esta situación, el sindicato argumenta que es imperativo ajustar los sueldos para paliar el impacto en los bolsillos de los ciudadanos.
Además, Comisiones Obreras ha planteado la reducción de la jornada laboral a 37,5 horas semanales. Consideran que esta medida, calificada por ellos como “de justicia”, no solo mejoraría la calidad de vida de los empleados, sino que también contribuiría a un equilibrio más saludable entre la vida personal y laboral.
Este llamamiento se suma a un contexto económico desafiante, en el que la inflación y el aumento de los costos básicos son preocupaciones constantes tanto para los trabajadores como para las entidades económicas de la región. La respuesta de las patronales a estas propuestas será fundamental para dirigir las futuras dinámicas laborales en Castilla-La Mancha.
Fuente: CCOO Castilla-La Mancha