El secretario regional de CCOO, Paco de la Rosa, ha reclamado tanto al presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, como a la patronal una reunión para, desde el seno del diálogo social, alumbrar situaciones para esa «parte muy importante de la población castellanomanchega que ya lo pasa mal» y que puede «sufrir consecuencias que aún no están medidas, pero que todo a apunta a que pueden ser situaciones muy complicadas».
Esta es la petición con la que el líder de CCOO ha lanzado antes de presidir la reunión del Consejo Regional que el sindicato ha celebrado en Toledo, en la que va a abordar «el inicio del curso político, tremendamente complicado por las muchísimas incertidumbres, por la situación económica que no se sabe qué deriva tomará, y por la «liza política, que cada vez se adelante más».
De ahí que CCOO, ha defendido De la Rosa, vaya a trabajar en un doble frente: por un lado con la patronal, para conseguir que ésta sea «responsable» y acometa, vía negociación colectiva, una subida salarial «decente» que evite a la masa trabajadora seguir perdiendo poder adquisitivo, y por otro, con los gobiernos, que tienen margen de maniobra para poner coto a la escalada de precios.
«La patronal se niega reconocer la difícil situación, pero pese a la guerra, algo más del 80% del incremento del IPC viene determinado por los beneficios empresariales. Las empresas han decidido aprovechar la coyuntura para tener más beneficios. Si los salarios sieguen perdiendo poder adquisitivo y los beneficios empresariales siguen disparando el IPC, podemos encontrarnos con que una parte muy importante de la población de Castilla-La Mancha va a sufrir consecuencias que aún no están medidas, pero que todo a apunta a que pueden ser situaciones muy complicadas», ha alertado.
Dicho esto, ha precisado que las empresas y las familias de la región son vasos comunicantes, de tal modo que la situación de las familias de la región afectara a empresas, «que lo pasarán mal si los ciudadanos no sobreviven a esta crisis».
«La negociación colectiva de este año y la del que viene son clave para salvar la economía de Castilla-La Mancha. Si la patronal no entiende que los salarios tienen que subir para salvar la difícil situación de la escalada de precios y para que la cesta de compra sea accesible para todos, teniendo en cuenta que el 40 por ciento de los castellanomanchegos son pobres o muy pobres, habrá conflicto y movilización», ha avanzado el responsable regional de CCOO.
SI LOS MERCADOS NO TIENEN ALMA, LA TENDRÁN QUE PONER LOS GOBIERNOS
Respecto al otro eje de actuación del sindicato de cara al otoño-invierno, De la Rosa ha adelantado que será los gobiernos, tanto el central como el regional, que tienen que hacer algo para controlar los precios y las cantidades «vergonzosas» de dinero de energéticos y banca.
«Si los mercados no tienen alma, la tendrán que poner los gobiernos. Por ello, hay que pedirles enérgicamente que pongan coto a la sinrazón de la escalada de precios y sigan con la subida del Salario Mínimo Interprofesional a 1.100 euros».
En este punto, ha avanzado su intención de pedir «cuanto antes» una reunión con los agentes sociales de la región –Gobierno, UGT y Cecam– para aportar soluciones a los que «lo pasan mal y, si nadie lo remedia, y la política tiene que remediarlo, lo van a pasar mucho peor».
Y es que De la Rosa ha abundado en la necesidad de que tanto la patronal «deje de pensar en salvarse a sí misma» y actúe de forma responsable y que los partidos políticos «salgan del barro y se pongan de acuerdo». «Es imposible entender que se esté haciendo política tan miserable en tiempos en los que se necesitan grandes consensos para buscar soluciones efectivas a los problemas de la gente».
De ahí que se haya mostrado confiado en que haya corresponsabilidad por parte de todos agentes para no tener que recurrir a la movilización. «Las movilizaciones dependen de la responsabilidad que la patronal quiera poner», ha terminado añadiendo.