Toledo ha sido el escenario de un importante debate sobre el fomento del empleo para las mujeres en Castilla-La Mancha, donde la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, ha puesto de relieve los avances logrados en la inserción sociolaboral de este colectivo. Durante su intervención en las Cortes, Franco destacó el compromiso del Gobierno regional con la igualdad en el mercado de trabajo y evidenció el impacto positivo de las políticas públicas implementadas desde 2015.
A lo largo de su discurso, la consejera subrayó que la tasa de desempleo femenino ha disminuido en más de 15 puntos desde la llegada del presidente Emiliano García-Page al Gobierno. Este descenso coloca a Castilla-La Mancha como la tercera comunidad autónoma con mayores reducciones en la tasa de paro femenino, superando la media nacional. Más de 59.000 mujeres han salido de las listas del paro en los últimos años, gracias a las iniciativas adoptadas por el Ejecutivo autonómico.
Franco no dudó en contrastar estos datos con los ocurridos durante el mandato del Partido Popular entre 2011 y 2015, periodo en el que más de 25.000 mujeres se sumaron al desempleo. «Tres de cada diez mujeres entraron en situación de desempleo», recalcó la consejera, añadiendo que en contraste, la disminución actual del desempleo femenino alcanza el 42,3%.
En términos de ocupación, resaltó que casi 88.000 mujeres más están trabajando en Castilla-La Mancha en comparación con 2015, lo que implica que tres de cada diez mujeres se han integrado al mercado laboral regional. En la actualidad, se registran 376.800 mujeres ocupadas, una cifra notable frente a la pérdida de empleos que se produjo en el mandato del PP, donde más de 30.000 mujeres fueron expulsadas del mercado laboral.
La consejera también abordó la situación de la afiliación laboral, destacando que, a pesar de que las mujeres representan solo el 42,12 por ciento del total de la población ocupada en la región, se han alcanzado cifras récord de afiliación femenina en un mes de agosto, con más de 345.731 mujeres trabajadoras.
Franco enfatizó que, aunque aún queda camino por recorrer, las políticas públicas reconocen las realidades diversas de mujeres que enfrentan mayores dificultades para la inserción, como aquellas con baja cualificación, mayores de 50 años, o que habitan en zonas rurales. La Estrategia Regional por el Empleo 2023-2027, que destina 158 millones de euros para fomentar el empleo femenino, ha sido una de las iniciativas clave en este sentido.
El Programa de Apoyo Activo al Empleo, que reserva el 55 por ciento de las contrataciones para mujeres, también ha dado resultados positivos, con un 63 por ciento de las contrataciones en este programa destinadas a mujeres, incluyendo a 532 víctimas de violencia de género.
Franco concluyó su intervención reafirmando el compromiso del Gobierno regional de seguir trabajando junto a todos los agentes sociales para aumentar la representación femenina en los altos niveles empresariales y directivos, y mejorando significativamente la presencia de mujeres en sectores como la industria, la logística, el transporte y la construcción. En este sentido, se celebró que el número de mujeres en puestos directivos haya aumentado de 10.900 en 2015 a 22.000 al cierre de 2022. Además, el incremento de autónomas en la región desde 2015 representa un paso sustancial hacia la promoción del emprendimiento femenino.
Con estos avances, el Gobierno de Castilla-La Mancha busca seguir rompiendo barreras en la igualdad de género en el ámbito laboral, demostrando un enfoque claro hacia la reducción del desempleo femenino y a la mejora de la inserción laboral de las mujeres en la región.