En abril se conmemora el tercer aniversario de la implementación de los nuevos contratos resultantes de la reforma laboral en España. En este contexto, Castilla-La Mancha ha registrado un hito significativo en el ámbito laboral: la temporalidad de los contratos se ha reducido a su mínimo histórico, descendiendo por primera vez a menos del 18%.
Esta tendencia a la baja refleja el impacto positivo de las reformas laborales en la estabilidad del empleo en la región. Las medidas introducidas con la reforma han buscado facilitar la transición hacia contratos más estables y duraderos, lo que a su vez promueve un mercado laboral más robusto y predecible.
La disminución en la temporalidad también es un indicativo de un cambio estructural en la forma en que se están gestionando los recursos humanos en diversas industrias de Castilla-La Mancha. Sin embargo, el camino hacia un mercado laboral plenamente equilibrado aún enfrenta desafíos, pues se debe seguir trabajando para que estos contratos de carácter estable sean consistentes en todas las regiones del país.
La reducción en la temporalidad de los contratos es un desarrollo destacable en el panorama laboral de Castilla-La Mancha, un reflejo del éxito y las áreas de oportunidad que persisten tras la reforma laboral de hace tres años.
Fuente: UGT Castilla-La Mancha
