Con el objetivo de abordar cuestiones de vital importancia como la salud mental, la prevención de conductas suicidas, la educación afectivo-sexual y las adicciones, el Gobierno de Castilla-La Mancha ha puesto en marcha un ambicioso Plan de Inteligencia Emocional y Bienestar Socioemocional. Este proyecto, anunciado por el consejero de Educación, Cultura y Deportes, Amador Pastor, tiene como fin último proteger y mejorar la salud de los jóvenes desde el ámbito educativo.
Durante una rueda de prensa, el consejero Pastor presentó el plan que se organiza en torno a cuatro ejes fundamentales. Este programa responde a estadísticas preocupantes reveladas por Unicef, que apuntan a que un alto número de adolescentes duermen con su teléfono móvil o se mantienen conectados por sentirse solos, resaltando así la creciente incidencia de la soledad en la juventud y las propuestas sexuales a menores a través de redes sociales. El consejero advirtió sobre la influencia de estos factores en la salud y bienestar socioemocional de los jóvenes, insistiendo en la necesidad de la acción preventiva.
El plan fue iniciado en el curso escolar 2022/2023, con 19 acciones formativas que llegaron a 2.524 docentes y 1.510 familias. Esta etapa inicial se centró en la sensibilización y en entender qué factores de riesgo pueden ser abordados desde el entorno educativo. Fruto de este esfuerzo, se han desarrollado una serie de guías y materiales didácticos ahora disponibles para su utilización tanto por la comunidad educativa en todas sus etapas como por las familias.
Una parte significativa de este plan es II Congreso de Bienestar Emocional en el ámbito educativo, previsto para los días 5 y 6 de abril. Este congreso, que cuenta con una asignación presupuestaria de 261.400 euros, tiene el objetivo de alcanzar a 3.300 docentes y duplicar el número de familias asistentes respecto al año anterior. Ponentes como Mario Alonso Puig, Elsa Punset, Patricia Ramírez o José Carlos Ruiz participarán en el evento.
En cuanto a la formación del profesorado, se llevarán a cabo 28 acciones para más de 3.300 docentes, enfocadas en los ejes del plan y con especial énfasis en la prevención del suicidio y las conductas autolíticas. Además, en colaboración con el Centro Regional de Formación Profesional (CRFP), se han formado grupos de trabajo en 174 centros educativos, beneficiando aproximadamente a 1.330 docentes.
El consejero Pastor finalizó su intervención instando al resto de la sociedad a colaborar y estar vigilantes en cuanto a la salud y el bienestar socioemocional de los jóvenes, manteniéndose alerta todos los días del año. Con estas medidas, el Gobierno de Castilla-La Mancha espera contribuir significativamente al bienestar emocional y a la prevención de riesgos para la salud mental de los estudiantes de la comunidad.
