Castilla-La Manchará contará el año próximo con una normativa “capital” para el futuro de la región y que nace del intenso trabajo y de un diálogo permanente desde 2017 cuando pasó a información pública y al consejo asesor de medio ambiente, habiendo recibido 1.029 propuestas de 46 entidades, organismos y personas físicas, mejorándose el texto inicial. Se trata de la Ley de Bienestar, Protección y Defensa de los Animales de Castilla-La Mancha, que pondrá a la región en la vanguardia como una sociedad avanzada en lo que refiere a la protección y cuidado de animales, no solamente de los domésticos.
En su comparecencia en la rueda de prensa, después de la reunión del Consejo de Gobierno para dar cuenta de los acuerdos alcanzados, el consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, se ha referido a la toma en consideración del anteproyecto de Ley de Bienestar, Protección y Defensa de los Animales de Castilla-La Mancha, tras haber pasado el periodo de información pública en la pasada legislatura, para su envío mañana al Consejo Consultivo para que la dictamine y continuar así con su tramitación, que desembocará en su aprobación en las Cortes regionales previsiblemente en el primer cuatrimestre de 2020.
Martínez Arroyo indicó a los medios de comunicación que actualmente en la Comunidad Autónoma solamente está regulada la protección y defensa de los animales domésticos por una normativa de 1990 (Ley 7/1990, de 28 de diciembre) que se encuentra “obsoleta” y con esta nueva Ley se da un paso más “acorde con la evolución que ha experimentado la sociedad en materia de protección y respeto a los animales”.
Dos principios básicos
De esta manera, se avanza un paso más y la normativa se basa en dos principios que el consejero trasladó como fundamentales. El primero es considerar a los animales “como seres sintientes, o sensibles” como establece el artículo 13 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea. Por otro lado, la protección de todos los animales en general y no solo de los calificados como animales domésticos, como sucede hasta el momento.
Solamente quedaría excluidos de su aplicación los animales que tienen una regulación concreta de su protección y por lo tanto se asegura y garantiza su bienestar, como los animales que viven y pertenecen a explotaciones ganaderas, las especies de fauna silvestre o los animales que participan en espectáculos taurinos y en parques zoológicos.
Prohibiciones de la nueva normativa
En lo que se refiere a prohibiciones, destacó el maltrato, la práctica de mutilaciones con fines exclusivamente estéticos, el sacrificio o matanza de los animales sin reunir las garantías previstas en la normativa y el mantenimiento permanente de animales atados o encadenados, el empleo de los silvestres en circos o publicidad, de la misma forma que quedan prohibidas las peleas organizadas de perros, de gallos o de cualquier animal.
El objetivo del sacrificio cero
En materia de novedades, Martínez Arroyo resaltó que uno de los objetivos principales de la nueva ley es lograr el “sacrificio cero”, en especial en los establecimientos que alojan animales siempre con las excepciones sanitarias, de seguridad o de zoonosis, y el establecimiento de la figura de la eutanasia de animales, que siempre será prescrita y realizada por un veterinario de manera rápida e indolora.
En lo que tiene que ver con identificación animal, va a conllevar una simplificación. Frente al doble registro (el regional y municipal), existirá un único Registro gestionado por el Consejo de Colegios Profesionales de Veterinarios de Castilla-La Mancha bajo las
En materia de identificación animal, va a conllevar una simplificación de la misma. Frente al doble registro (el regional y municipal), existirá un único Registro gestionado por el Consejo de Colegios Profesionales de Veterinarios de Castilla-La Mancha bajo las directrices de Dirección General de la Consejería con Competencias en materia de identificación y registro de animales, al que tendrán acceso las Administraciones con competencias en el ámbito de aplicación de esta ley.
El consejero ha querido poner en valor la existencia, dentro de la nueva normativa de las normas sobre divulgación, información y educación en materia de protección animal y explicó que una vez aprobada se realizarán campañas de sensibilización “con el objetivo concienciar a la población de la tenencia responsable animales y evitar cualquier situación de maltrato”.
Se introduce también en el texto la creación del Consejo Asesor de Bienestar y Protección de los Animales como órgano colegiado de participación, consulta, información y asesoramiento sobre aspectos de interés y relacionados con el bienestar y la protección de los animales.
Así también se contempla que los animales tengan permitido el acceso a edificios públicos, transportes públicos, restaurantes y hoteles, salvo aquellos que consideren lo contrario.
Sanciones ya en euros y que se multiplican por 10
En lo referente a sanciones, Martínez Arroyo explicó que la ley actualiza las sanciones en vigor. Se cambian a euros y se multiplican por diez. En la actual normativa de 1991 las multas están reflejadas en pesetas con un mínimo de 1.000 pesetas (6 euros) y un máximo de un millón (6.000 euros). A partir de la aprobación de esta normativa nueva, las sanciones se amplían hasta un máximo de 60.000 euros.
El consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural destacó que la finalidad de esta nueva Ley de Bienestar, Protección y Defensa de los animales es la de tener una vigencia en el tiempo y responde al “interés y demandas de la sociedad moderna” en Castilla-La Mancha, que desea y “nos hace sentir orgullosos”, que tengamos una “ley mejor que proteja a los animales”.
Una normativa cuya realización no ha sido “sencilla” y ante la cual se realizó un llamamiento a todas las fuerzas políticas para que lo apoyen en las Cortes de Castilla-La Mancha.
