Las selecciones sub-12 de Castilla-La Mancha participaron en el Campeonato de España de Selecciones Autonómicas, celebrado recientemente en la Comunidad de Madrid, con grandes esperanzas y un espíritu competitivo. Sin embargo, a pesar de los esfuerzos y la clara mejora en su desempeño a lo largo del torneo, ambos equipos, el femenino dirigido por Mamen de la Cruz y el masculino por Javi Mínguez, no consiguieron avanzar más allá de la fase de grupos. Los choques estuvieron marcados por una intensa lucha y un alto nivel de juego, indicativo de la calidad del fútbol base en la región.
La falta de acierto en momentos cruciales fue un factor determinante en la temprana salida de las selecciones de Castilla-La Mancha del campeonato. A pesar de contar con oportunidades claras, la suerte no estuvo de su lado, y la eficacia en el remate final no se materializó como se esperaba. Este obstáculo, común en competiciones de alta exigencia, resalta no solo la importancia de la técnica y la estrategia, sino también del componente psicológico del deporte. Sin embargo, los buenos ratos de juego y la actitud mostrada sirven como aprendizaje valioso para los jóvenes talentos.
Aunque el premio de avanzar en el torneo se mantuvo esquivo, el evento fue una experiencia enriquecedora para ambas selecciones. Sirvió como un escaparate para el talento joven de Castilla-La Mancha y como una oportunidad para medirse ante algunos de los mejores equipos a nivel nacional. El espíritu deportivo, la mejora continua y el compromiso mostrado por jugadores y cuerpo técnico ofrecen una base sólida sobre la cual construir y soñar con futuras competiciones. La despedida sin premio no marca el fin, sino el comienzo de un camino lleno de posibilidades y aprendizaje para el fútbol base de la región.
