Castilla-La Mancha ha dado un paso significativo hacia la mejora del comercio minorista al participar activamente en la reciente Conferencia Sectorial para la Mejora Regulatoria y el Clima de Negocios, presidida por el ministro de Economía, Carlos Cuerpo. La consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, destacó la importancia de la unidad de acción entre las autonomías y los diferentes agentes presentes en esta reunión para la aprobación de una nueva ordenanza tipo de comercio minorista.
Esta legislación está diseñada para unificar y simplificar el proceso de concesión de licencias en el sector del comercio, ofreciendo un marco común que promueva la agilidad en las gestiones que realizan las entidades locales en todo el país. Durante su intervención, Franco resaltó el peso del comercio en la economía de Castilla-La Mancha, donde más de 40.000 establecimientos generan alrededor de 108.000 empleos y reportan una facturación superior a los 30.000 millones de euros.
La nueva ordenanza incorpora la figura de la declaración responsable para la autorización de actividades comerciales, un cambio que, según la consejera, puede tener un impacto muy positivo en un sector crucial para la vertebración económica y social de la región. Además, Franco mencionó que esta iniciativa se alinea con el Plan Estratégico que su gobierno está desarrollando en colaboración con el sector, en el que uno de sus ejes principales está enfocado en la revisión normativa y la mejora del clima regulatorio.
El compromiso de colaboración se ha notado entre todos los participantes en la Conferencia, desde las comunidades autónomas hasta la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), la Cámara de Comercio y el Consejo de Productividad. La consejera elogió el apoyo del Ministerio para facilitar la evolución de los trabajos conjuntos en materia de simplificación administrativa.
Franco también aprovechó la ocasión para agradecer al Ministerio de Economía por elegir a Castilla-La Mancha como ejemplo en la presentación de avances en la reducción de trámites administrativos. Compartió algunos logros en la región, como la Ley de Proyectos Prioritarios y la inminente Ley de Simplificación Administrativa, que se prevé aprobar en el primer semestre del próximo año, además de los Proyectos de Singular Interés que fomentan emprendimientos en la comunidad.
Finalmente, la consejera abordó otros desafíos que, aunque no son competencia directa del Ministerio de Economía, afectan la actividad empresarial, como el cuello de botella energético. Para cerrar, Franco anunció la intención de organizar, junto con la FEMP y el Ministerio, una jornada informativa para que las entidades locales de la región conozcan en detalle la nueva ordenanza tipo, con el objetivo de facilitar la actividad económica y comercial en Castilla-La Mancha.