Puede sonar paradójico, pero cada año hay más personas que quieren entrar en la cárcel. No como internos, sino como parte del cuerpo de Ayudantes de Instituciones Penitenciarias, un proceso selectivo público que despierta creciente interés debido a su accesibilidad, su atractivo sueldo y condiciones de trabajo. Este interés reciente ha sido confirmado con la publicación de la convocatoria de 2024 por el Ministerio para la Transformación Digital y de la Función Pública en el Boletín Oficial del Estado (BOE), donde se han puesto a disposición 800 plazas de acceso libre.
Estas 800 plazas, que no incluyen las comunidades de Cataluña y País Vasco, están dirigidas a cubrir puestos en alguno de los 84 centros penitenciarios administrados por la Administración General del Estado. La academia online sinergiaprisiones.com, especializada en la preparación de aspirantes a estas oposiciones, subraya las buenas condiciones de trabajo y sueldo, los requisitos limitados y la sencillez de las pruebas como factores clave detrás del alto número de aspirantes, que oscila entre 12.000 y 13.000 personas cada año. Sorprendentemente, en los últimos 5 años, más de 4.000 nuevas vacantes han sido creadas, destacando un significativo aumento de la participación femenina, que representa actualmente el 60% de los aspirantes.
Mireia Villar, directora de Sinergia Prisiones y ella misma una ex opositora que logró su plaza como ayudante de Instituciones Penitenciarias en Andalucía, destaca que muchas personas se acercan a la academia con el objetivo de cambiar de vida, buscando estabilidad y una carrera profesional que les permite conciliar su vida personal y familiar. Tras superar la oposición, los ayudantes de Instituciones Penitenciarias disfrutan de un salario neto de entre 1.600 y 1.900 euros al mes, dependiendo del área de trabajo, y de 28 días de descanso al año, con la posibilidad de hasta cinco días libres consecutivos y un total de 45 días libres al año contando vacaciones, asuntos propios y compensaciones.
En España, funcionan 84 centros penitenciarios de la Administración General del Estado, donde prestan servicio unos 21.000 funcionarios, entre los cuales aproximadamente un 70% son hombres y el 30% son mujeres. Las principales funciones de estos ayudantes incluyen la vigilancia y custodia de presos y penados, así como tareas de reeducación, rehabilitación y administrativas.
Se considera una de las oposiciones más asequibles para acceder a la administración pública, dada la menor ratio de aspirantes por plaza comparada con otras oposiciones. Desde Sinergia Prisiones señalan que muchos aspirantes se presentan sin estar realmente preparados, por lo tanto, aquellos que dedican tiempo al estudio tienen altas posibilidades de conseguir una plaza. Los requisitos para participar son tener la nacionalidad española y el título de Bachiller o Técnico, sin necesidad de pasar por un examen psicotécnico ni pruebas físicas, aunque sí se requiere superar un examen médico básico.
El proceso selectivo consta de una fase de oposición con dos exámenes tipo test, seguido de un periodo de prácticas, cubriendo 50 temas que abarcan Derecho Administrativo, Derecho Penitenciario, Derecho Penal y Conducta Humana. Este interés renovado por las oposiciones para el cuerpo de Ayudantes de Instituciones Penitenciarias demuestra una tendencia creciente hacia la búsqueda de estabilidad laboral y personal en sectores públicos con condiciones de trabajo y remuneración atractivas.