La Asociación de Jóvenes Agricultores de Castilla-La Mancha (Asaja) ha informado de la difícil coyuntura que atraviesa la ganadería en la región, describiendo el estado del sector como «dramático». Durante una rueda de prensa, José María Fresneda, presidente de Asaja en la región, junto con María Tapia, responsable de Ganadería, ha demandado un mayor apoyo y atención por parte de las administraciones en aspectos fundamentales como la sanidad, los seguros y las subvenciones.
Fresneda ha subrayado la necesidad de un respeto y una dedicación hacia la ganadería, tanto extensiva como intensiva, pero ha expresado su preocupación por la lentitud administrativa respecto a un plan estratégico de ganadería para Castilla-La Mancha, presentado en octubre al Gobierno regional. A pesar del compromiso presupuestario percibido, el presidente de Asaja señala que, sin una actuación concreta y oficial, el proyecto corre el riesgo de no materializarse.
Además, Fresneda ha contrastado la situación de la ganadería española con la de otras regiones de la Unión Europea, apuntando que el apoyo estatal y autonómico es «insuficiente», y ha criticado que el sector sigue siendo «la gran olvidada» en las 43 medidas de apoyo al sector agrario español recientemente acordadas por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, las cuales no han sido firmadas por Asaja.
Por otro lado, María Tapia ha advertido de la grave realidad que afronta la ganadería y ha resaltado la necesidad de medidas efectivas para enfrentar los desafíos sanitarios que crean inseguridad en el sector. Ha solicitado un portavoz firme que represente a Castilla-La Mancha ante el Ministerio, enfatizando la urgencia de controlar los puestos fronterizos para prevenir la entrada de enfermedades y vectores que afecten al ganado. Tapia también ha pedido mejoras en las campañas de saneamiento y la disponibilidad de una vacuna contra la Enfermedad Hemorrágica Epizoótica (EHE).
Sobre el ámbito de los seguros, la representante de Asaja ha reclamado cobertura para enfermedades de declaración obligatoria, y en referencia a las subvenciones, ha destacado la necesidad de recibir el máximo apoyo posible, equiparable al de otras comunidades o el Estado. Ha denunciado, además, el retraso en las ayudas asociadas a cada animal en las explotaciones de Castilla-La Mancha, criticando la falta de liquidez que esto ha ocasionado en un año marcado por enfermedades y sequías.
El llamamiento de Asaja es claro: una petición a las administraciones para que brinden el cuidado necesario al sector ganadero, para que en palabras de Tapia, «nos mimen un poco», para afrontar las complejidades actuales y fortalecer la posición de la ganadería en Castilla-La Mancha.
