En el marco de la controversia generada en algunas administraciones educativas por la iniciativa de prolongar el curso escolar más allá del 30 de junio, ANPE manifestó su oposición y rechazo por varias razones:
• El curso no se suspendió en ningún momento, simplemente han cambiado las circunstancias debido a la alarma sanitaria en la que estamos inmersos. El profesorado sigue trabajando, adaptando y desarrollando las programaciones a las nuevas circunstancias, y el alumnado desde su domicilio sigue realizando su actividad lectiva de manera diaria. Por lo tanto, el periodo lectivo debe terminar el 30 de junio incluidos los exámenes como sucede cada año.
• Otra circunstancia añadida es que las altas temperaturas que se registran en julio en muchas comunidades autónomas, requiere que los centros educativos tengan instalaciones adecuadas como aire acondicionado y que al día de hoy no todas las poseen.
• Además, en el mes de julio se llevan adelante los procesos selectivos y gran parte del profesorado estaría participando de las oposiciones: muchos docentes funcionarios forman parte de tribunales y los docentes interinos se presentan a las pruebas. Por tanto, sería inviable ampliar el periodo lectivo por cuestiones de personal docente y también por cuestiones de espacio ya que se ocupan los centros educativos para la realización de las pruebas.
• En muchas ocasiones, el mes de julio es un mes donde muchas familias disfrutan de sus vacaciones y si se alarga el curso escolar al mes de julio se verían perjudicadas con esta medida.
Desde ANPE le agradecen a todos los docentes, que en una situación tan excepcional a la que se enfrentan, estar a la altura y adaptarse tan rápidamente a las circunstancias. Extender el curso escolar más allá del mes de junio supondría una falta de respeto a su labor, que con tanto esfuerzo, vocación y dedicación realizan todos los días.