El Grupo Municipal ‘A Guadalajara hay que quererla’ (Aike) ha presentado este jueves una nueva moción que será debatida en el Pleno de enero, enfocándose en la problemática del ruido en Guadalajara y buscando su disminución mediante la creación de un Plan Acústico y la revisión de la ordenanza vigente en torno a la contaminación acústica y térmica.
Según han señalado desde Aike en una nota de prensa, los estudios acústicos recientes, que son preliminares para la implementación de una Zona de Bajas Emisiones en la ciudad, muestran que el nivel de ruido sobrepasa los umbrales recomendados por la Organización Mundial de la Salud. Dichas recomendaciones ubican el límite óptimo en los 55 decibelios para exteriores, mientras que en Guadalajara se han registrado índices superiores a los 70 decibelios, alcanzando incluso los 80 decibelios en ciertas calles.
La portavoz de Aike en el Ayuntamiento, Susana Martínez, ha identificado al tráfico rodado como la principal fuente de los elevados niveles de ruido en la ciudad. A este factor, se suman otras causas como las festividades, el ocio nocturno, las obras y el uso de maquinaria como barredoras o sopladoras. Martínez ha destacado que, a pesar de los impactos negativos que tiene la contaminación acústica sobre la salud, se observa escaso reconocimiento y regulación por parte de las autoridades, considerándolo un serio problema medioambiental y un aspecto crucial para la calidad de vida urbana.
El grupo municipalista ha resaltado la antigüedad de la Ordenanza de Protección contra la Contaminación Acústica y Térmica, la cual data de hace una década, y ha subrayado que esta no está alineada con las directrices actuales ni las estipulaciones relacionadas con la Zona de Bajas Emisiones ni las recomendaciones de la OMS.
En consecuencia, Aike propone la creación de un Plan Acústico Municipal, que incluiría un mapa sonoro que clasificaría las áreas de la ciudad en función de sus niveles de ruido y establecería programas de actuación para reducir progresivamente el ruido, afectando tanto la Zona de Bajas Emisiones como el resto de Guadalajara.
«Llevamos a Pleno la propuesta de actualizar la ordenanza de contaminación acústica y la elaboración del Plan Acústico Municipal, con el objetivo principal de controlar el ruido, proteger la salud de los ciudadanos, mejorar la calidad de vida y asegurar que se cumpla con la legislación en materia de contaminación acústica», ha declarado Martínez, enfatizando la urgencia y relevancia de estas iniciativas para el bienestar de la población.
