En un significativo movimiento hacia la protección del bienestar de los pacientes, el Ministerio de Sanidad de España ha implementado una normativa que restringe el número de profesionales autorizados para realizar cirugías estéticas. Esta regulación estipula que solo aquellos médicos con especialidad en Cirugía Plástica, Estética y Reparadora, o especialidades quirúrgicas con formación en cirugía estética, podrán realizar dichas intervenciones. Esta medida busca mitigar los riesgos asociados a procedimientos realizados por individuos no cualificados, un problema que ha tenido repercusiones tanto en España como en otras naciones, como Turquía.
La prestigiosa firma Acibadem, reconocida por su liderazgo en el ámbito de la cirugía estética en Turquía, respalda enfáticamente las nuevas normativas españolas. La empresa sostiene que estas regulaciones son esenciales para crear un entorno seguro y estructurado dentro del sector. Acibadem apuesta por la profesionalización del campo, subrayando la trascendencia de contar con normativas estrictas que aseguren que todos los procedimientos se ejecuten bajo los más altos estándares de calidad. La salvaguarda de los pacientes es una prioridad para esta institución turca, que aplaude cualquier esfuerzo dirigido hacia la promoción de prácticas responsables y la consolidación de la seguridad en la cirugía estética.
Tanya Nevenova, supervisora de Desarrollo de Negocio de Acibadem, manifiesta la importancia de estas regulaciones al afirmar: «Estamos de acuerdo con el Ministerio y reiteramos que, en caso de viajar a Turquía para someterte a un tratamiento de este tipo, se recomienda la máxima precaución y comprobar el nivel de calidad del centro y los facultativos seleccionados». Además, expresa orgullo al ver cómo España toma la iniciativa para proteger a los pacientes y garantizar que solo los profesionales cualificados realicen procedimientos estéticos.
Con el incremento de la demanda de servicios de cirugía estética, ha surgido una proliferación de individuos sin la cualificación necesaria ofreciendo estos servicios, lo que representa un considerable riesgo para la salud de los pacientes. Desde su llegada a España, Acibadem ha enfatizado la importancia de educar al público tanto sobre los procedimientos estéticos como sobre el proceso de selección de centros y profesionales acreditados. Esto no solo combate el intrusismo, sino también el fraude en un sector que demanda los más altos niveles de seguridad.
La nueva normativa española no solo resalta la importancia de la formación profesional, sino también la necesidad de un enfoque integral en el cuidado del paciente y su acompañamiento durante todo el proceso. Esta regulación refuerza la visión de prácticas que prioricen la salud y seguridad del paciente, promoviendo así un estándar más elevado y seguro en los tratamientos estéticos.