El 2 de abril es reconocido como el Día Mundial de la Conciencia sobre el Autismo, una oportunidad para concientizar sobre los derechos de las personas con Trastornos del Espectro Autista (TEA) y fomentar la comprensión y aceptación de la neurodiversidad. El TEA es un trastorno del neurodesarrollo que puede afectar la comunicación social, la interacción social, intereses y conductas repetitivas. Los criterios diagnósticos del TEA son déficits persistentes en la comunicación social, interacción social y patrones conductuales. Afecta al 1% de la población mundial y se cree que es una afección permanente que puede durar toda la vida de una persona. Si bien se diagnostica con mayor frecuencia en la infancia, los primeros signos pueden ser evidentes en la edad adulta.
El diagnóstico de TEA en la edad adulta puede ofrecer inmensas ventajas, como una mayor comprensión de sí mismo y de cómo se relaciona con el mundo. También puede llevar a una nueva perspectiva de la infancia y a mirar las experiencias pasadas con otros ojos. Los adultos con TEA tienen muchas dificultades para tener una percepción exacta de los pensamientos, los sentimientos, el lenguaje no verbal o los significados implícitos de la comunicación. Además, la desregulación emocional es un rasgo recurrente del espectro autista en adultos, y estos pueden tener dificultades para regular sus emociones.
Es común creer que los autistas solo se sienten cómodos en soledad y no les interesa socializar; sin embargo, a menudo les gustaría crear nuevas relaciones, pero les resulta difícil hacerlo. Estos tropiezos relacionados con las interacciones sociales pueden causar mucho sufrimiento, especialmente en el periodo de la adolescencia. La detección del TEA en adolescentes y adultos puede ayudar a comprender mejor las propias dificultades y aprender a aprovechar los puntos fuertes. Además, ser consciente de la propia condición es fundamental para poder solicitar apoyo externo.
La persona con TEA debe ponerse en contacto con un profesional de la salud mental especializado en autismo en adultos. Cada caso es diferente, por lo que es fundamental consultar a un profesional sanitario que pueda orientar en la elección de la terapia más adecuada a sus necesidades. La psicoterapia cognitivo-conductual integrada es especialmente eficaz en el tratamiento de los TEA en adultos. La persona con TEA puede obtener muchos beneficios de un itinerario terapéutico específico, como el realizado por Buencoco, que ofrece sesiones en línea con terapeutas expertos en el tratamiento de trastornos del espectro autista.
