En un intento por trazar un camino hacia la paz, el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, ha revelado sus planes para presentarle al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, una propuesta estratégica en septiembre, diseñada para poner fin al conflicto en curso. La iniciativa no solo está dirigida al actual mandatario estadounidense, sino también a las figuras políticas que podrían sucederlo en el cargo, incluidos la vicepresidenta Kamala Harris y el ex presidente Donald Trump.
Durante una conferencia de prensa en Kiev, con la presencia de numerosos periodistas, Zelenski declaró su intención de compartir este plan con Biden, Harris y Trump. El liderazgo ucraniano subraya la necesidad del respaldo continuo de Washington tras las elecciones presidenciales de noviembre en EE.UU., enfatizando la importancia de mantener una alianza sólida independientemente del resultado electoral.
El presidente ucraniano mantuvo en secreto los detalles específicos del plan, pero mencionó que las operaciones militares en el óblast ruso de Kursk, donde las fuerzas ucranianas han ganado territorio, forman parte de esta estrategia más amplia. Asimismo, el plan incluye propuestas económicas y consideraciones sobre el papel de Ucrania en la seguridad internacional, así como pasos concretos para incentivar a Rusia a cesar las hostilidades.
Con respecto a la posibilidad de que Ucrania ceda territorios como parte de futuros acuerdos de paz, Zelenski fue claro en su postura, afirmado que los ucranianos no están preparados para esta opción. Sin embargo, reconoció que tal decisión final dependerá en gran medida de la postura de los aliados internacionales de Ucrania.
Este anuncio llega en un momento crítico, donde las recientes adquisiciones de aviones F-16 por parte de Ucrania han demostrado ser cruciales. Según Zelenski, estos jets desempeñaron un rol esencial en la intercepción de drones y misiles rusos durante los ataques más recientes contra Ucrania, subrayando la necesidad de un apoyo continuo y efectivo de sus aliados internacionales.
En general, la iniciativa de Zelenski no solo busca un camino hacia el fin del conflicto, sino que también intenta asegurar el apoyo de las futuras administraciones estadounidenses, estableciendo así las bases para una solución duradera que promueva la estabilidad en la región y más allá.
