El pasado fin de semana, del 7 al 8 de septiembre, Campillo de Altobuey, en la provincia de Cuenca, se convirtió en el epicentro del orientacionismo al albergar la vigésima edición del Trofeo Orientijote. Este evento, consolidado en el calendario de competiciones, se llevó a cabo en el pintoresco entorno de «El Almorchón», donde la estrategia y la habilidad de lectura de mapas se pusieron a prueba en un terreno marcado por la alternancia de pinares y un denso monte bajo.
La ubicación, que presentaba zonas con alta densidad de vegetación —incluyendo carrascas, encinas y coscojas—, planteó un verdadero desafío para los participantes. La complejidad del recorrido obligó a los corredores a afinar su observación y a desarrollar una interpretación precisa de la cartografía, elaborada por el experto Vladimir Lyuk. Por su parte, los diseños de las pruebas estuvieron a cargo de los reconocidos trazadores Raúl Sánchez para la distancia media y Maikel Rodríguez para la larga.
La cita atrajo a una notable participación de orientadores no solo de Castilla-La Mancha, sino también de comunidades limitrofes, como Madrid, Comunidad Valenciana y Murcia. Los competidores lucharon por subir al podio, aunque los máximos galardones fueron a parar a manos de María Prieto, del club Malarruta, y David Rojas, del Alabarda-O, que se consagraron como los ganadores absolutos del certamen.
La emoción del orientacionismo en la región no termina aquí. El próximo gran desafío está programado para los días 28 y 29 de septiembre, con la celebración del Campeonato de Castilla-La Mancha en Garciotum, Toledo, evento que será organizado por el C.D. Orientación Navalcán.
A medida que se recabará más información, incluyendo fotografías y detalles adicionales sobre los resultados de las distintas categorías, estos serán publicados en la web oficial del evento, manteniendo así a la comunidad informada y conectada con la actividad del orientacionismo.
Fuente: Federación de Orientación de Castilla-La Mancha