El Grupo Parlamentario Vox en las Cortes de Castilla-La Mancha ha hecho declaraciones polémicas sobre la inmigración illegal en relación con la criminalidad en la región, a raíz de la reciente detención de tres individuos en Fuensalida, Toledo. Estos arrestos han sido atribuídos a su pertenencia a una célula de adoctrinamiento yihadista.
Vox ha afirmado que la inmigración ilegal constituye un riesgo para la seguridad del país, aludiendo a que los actuales procesos migratorios están permitiendo la entrada de elementos radicales, incluidos miembros de organizaciones terroristas como Daesh. Esta declaración fue realizada a través de una nota de prensa donde la formación política señala que la situación migratoria en España se ha convertido en un «coladero».
La incidencia de estos detenidos se suma a un total de 81 arrestos en todo el territorio nacional por motivos relacionados con el yihadismo en lo que va de 2024, una cifra que según el grupo es la más alta desde los atentados del 11 de marzo en Madrid, marcando así un máximo histórico por segundo año consecutivo.
Críticas al PSOE no se han hecho esperar. Vox sostiene que el partido socialista intenta desligar la inmigración ilegal del aumento de la criminalidad y la amenaza yihadista, pero la formación argumenta que la realidad desmiente esta perspectiva. En este contexto, han enfatizado la necesidad de una inmigración «legal, controlada y adaptada a las necesidades de España», insistiendo en la importancia de la integración y la voluntad de los inmigrantes.
La posición de Vox resalta el clima político tenso en torno a la inmigración y la seguridad en España, y la manera en que estos temas se están entrelazando en el discurso público y político actual.