El juicio contra J.F.F., acusado de acabar con la vida de dos personas, entre ellas su propio hermano, así como de intentar asesinar a una tercera durante un enfrentamiento en Las Seiscientas de Albacete en julio de 2023, ha quedado visto para sentencia. Tras la práctica de pruebas y la presentación de informes finales por parte de Fiscalía, acusación particular y Defensa, la fase oral del proceso judicial ha concluido.
En la última sesión, celebrada este lunes, el acusado optó por no hacer uso de su derecho a la última palabra. Con esto, la atención se centra ahora en la preparación del objeto del veredicto que será entregado al jurado para su deliberación en privado.
La fiscal del caso presentó argumentos contundentes, sosteniendo que J.F.F. es culpable de un homicidio agravado al haber matado a su hermano. Afirmó que este acto no fue realizado por imprudencia, sino con dolo eventual, resaltando que el acusado debió prever las consecuencias de sus acciones al disparar en dirección a dos personas. «Yo disparo y como estoy disparando a dos personas tengo que mentalmente representarme la posibilidad de que mis disparos le puedo dar a cualquiera de las dos», expuso la fiscal.
Además, la fiscal acusa a J.F.F. de asesinato en el caso de A.F.G., advirtiendo sobre la alevosía en el acto de dispararle mientras estaba herido y en el suelo, imposibilitado para defenderse. También se le imputa tentativa de homicidio hacia J.F.S. debido a su intención de matarlo, argumentando que J.F.F. disparó en varias ocasiones sin lograr su objetivo, posiblemente por falta de munición. A esto se añade un cargo por tenencia ilícita de armas, dado que el acusado carecía de la documentación necesaria para poseer un arma corta en las circunstancias descritas.
La acusación particular respaldó completamente los argumentos del Ministerio Público, describiendo el material probatorio como «abundante e incontestable». Reiteraron los delitos de asesinato y tentativa de homicidio, así como el de tenencia ilícita de armas, pidiendo al jurado un veredicto de culpabilidad.
Por su parte, el abogado defensor cuestionó la solidez de las pruebas presentadas por las acusaciones, indicando que no podían probar su versión de los hechos. Expresó su escepticismo sobre la veracidad de los testigos y solicitó un veredicto de no culpabilidad, señalando la dificultad de entender lo sucedido en un caso cuya verdad considera elusiva.
Con la conclusión de los informes, el jurado ahora se prepara para deliberar sobre el caso de J.F.F., que ha generado un gran interés público por la gravedad de los hechos imputados.