El presidente del Grupo parlamentario Vox en las Cortes de Castilla-La Mancha, David Moreno, ha manifestado su postura crítica hacia el PSOE y el PP en relación con la reciente reforma del Estatuto de Autonomía de la región. Según Moreno, ambas formaciones han revelado sus verdaderas intenciones al centrarse en un aumento del número de diputados en las Cortes regionales.
En declaraciones a los medios a la entrada del edificio de las Cortes, junto al secretario general de Vox, Ignacio Garriga, Moreno reiteró el rechazo de su grupo a la reforma. «Desde el grupo parlamentario Vox lo denunciamos desde el primer momento», destacó, argumentando que el único objetivo del PSOE y del PP era «incrementar» la cantidad de representantes en el parlamento regional.
El dirigente de Vox consideró que los recursos destinados a este aumento del número de diputados, que ascenderían a 17 millones de euros, deberían ser redirigidos hacia áreas cruciales como la sanidad pública. «Emiliano García-Page va a recortar 70 millones de euros en 2025», advirtió, enfatizando la necesidad de destinar esos fondos a mejorar las infraestructuras y servicios públicos de la región.
Moreno señaló que estas inversiones son esenciales para llevar a cabo mejoras en las infraestructuras, tales como la construcción de autovías y el arreglo de las deficientes redes de carreteras, así como para atender urgentemente las necesidades de los centros escolares, donde se prometió un plan de climatización que aún no se ha materializado.
La postura de Vox, según Moreno, se ha mantenido constante desde el inicio del debate sobre la reforma. «No estamos dispuestos a ser ni cómplices ni a apoyar el incremento del número de diputados ni ningún gasto político más en nuestra región», afirmó.
Además, el presidente del grupo parlamentario Vox criticó las políticas del gobierno socialistas que, a su juicio, generan un impacto negativo en la ciudadanía. «Se sufren las políticas socialistas por partida doble», manifestó, refiriéndose tanto al gobierno nacional de Pedro Sánchez como al regional de García-Page, el cual, según Moreno, ha estado aumentando la presión fiscal, recaudando más impuestos y ofreciendo servicios públicos cada vez más deficientes y precarios.
Con el Congreso regional del Partido Socialista a la vista, Moreno anticipó que no habrá cambios significativos en la dirección del partido y que continuarán las mismas políticas que actualmente afectan a la región, con García-Page actuando como un «aliado» de Sánchez.