El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha expresado su opinión sobre la reciente reunión entre el presidente catalán, Salvador Illa, y Carles Puigdemont, calificándola de «críptica». En declaraciones a la prensa al llegar a la inauguración del curso ‘De la idea a la acción: los 30 años del Comité de las Regiones y la evolución de la política de cohesión’ en Santander, García-Page manifestó su deseo de que Illa haya logrado mantener «el mando a distancia» de la gobernabilidad en Cataluña.
El presidente regional subrayó que la reunión suscita numerosas «preguntas e interrogantes», apuntando a que no se han obtenido «ninguna respuesta» clara, ya que fue un encuentro «críptico e indescifrable», incluso en los gestos de sus participantes. A pesar de sus críticas a Puigdemont, García-Page mostró un aprecio especial por Salvador Illa, a quien valora por su esfuerzo y liderazgo. Según García-Page, Illa es quien verdaderamente representa a Cataluña, mientras que Puigdemont representa «el peor problema y la peor cara de Cataluña».
El presidente de Castilla-La Mancha finalizó con un mensaje claro: expresó su esperanza de que Illa mantenga su papel de presidente de manera contundente y que «no haya mando a distancia» desde Puigdemont, a quien le atribuyó un control que debería ser exclusivo de la gobernación catalana. García-Page concluyó señalando que tal intervención externa sería dolorosa para los ciudadanos catalanes.