En una reciente rueda de prensa, el presidente del Partido Popular de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, ha manifestado críticas contundentes hacia el proyecto de ley de Presupuestos Generales de la Comunidad Autónoma para el año siguiente, previsto para ser aprobado este miércoles. Núñez sostiene que los presupuestos, que se espera sean respaldados por la mayoría absoluta del PSOE, están fundamentados en «ingresos ficticios» y «previsiones irreales», desoyendo por completo las 800 enmiendas planteadas por su partido.
Núñez ha arremetido contra la administración de Emiliano García-Page, describiéndola como «nefasta» tanto en términos sanitarios como económicos, señalando que el gobierno ha fallado en liderar exitosamente la región y ha criticado la alianza con el «Sanchismo» en Castilla-La Mancha. Ha subrayado que la inminente aprobación de los Presupuestos es un suceso preocupante y ha hecho especial mención a la influencia de los acuerdos de Sánchez con el independentismo catalán en la financiación de la región, argumentando que estos pactos resultan en el desvío de recursos de Castilla-La Mancha a Cataluña.
El líder del PP ha señalado el deterioro del sistema de salud regional, evidenciado por un incremento del 21% en las listas de espera desde que García-Page asumió el cargo, registrando un salto particularmente notable del 35.9% en el último año. Con 12.473 pacientes adicionales en espera de intervenciones quirúrgicas o pruebas diagnósticas, Núñez lamenta la ausencia de un proyecto de modernización de la Atención Primaria y la escasez de profesionales, situación especialmente grave en áreas rurales.
Núñez aprovechó para presentar propuestas del PP como la recuperación de la Carrera Profesional Sanitaria, la implementación de un Plan de Choque contra las listas de espera y la modernización de la Atención Primaria, medidas que él considera clave para revertir la actual situación sanitaria.
A nivel económico, criticó la posición del PIB de Castilla-La Mancha, que se ubica significativamente por debajo tanto de la media nacional como europea, al igual que la renta disponible de los ciudadanos de la región. Según sus afirmaciones, Castilla-La Mancha presenta unas tasas un 19,84% inferiores a la media del país y un 36,3% menores en comparación con la media europea, además de una diferencia de 14,1 puntos en la renta disponible respecto al promedio nacional.
Esta posición del presidente regional del PP refleja una marcada discrepancia con respecto a las políticas económicas y sanitarias actuales del Gobierno de Castilla-La Mancha, situando su partido en clara oposición a las decisiones presupuestarias del Ejecutivo liderado por el PSOE.
