El presidente regional del PP, Paco Núñez, ha criticado fuertemente al Gobierno de Castilla-La Mancha por lo que considera un abandono de los ciudadanos y de los alcaldes durante el apagón que afectó ayer a todo el país. En una comparecencia ante los medios, Núñez afirmó que ha existido «una clara desinformación» por parte de las autoridades, que ha provocado un caos generalizado.
El líder popular destacó que esta situación ha tenido un impacto directo en el ámbito educativo, donde los centros han tenido que actuar de forma independiente ante la falta de información oficial. «Unos se han abierto, otros no, unos han aceptado a los niños y luego han pedido a los padres que vengan a recogerlos, y otros directamente no han estado», lamentó Núñez. A su juicio, educadores y padres se encontraron sumidos en la confusión, sin saber si debían ir o enviar a sus hijos a las escuelas.
Núñez también mencionó su mantenido «contacto permanente» con alcaldes y portavoces municipales del PP en la región, para comprender mejor la situación desde el ángulo local. Felicitó a los alcaldes de Castilla-La Mancha por su respuesta ejemplar ante la crisis, ayudando a personas en situaciones complejas, como aquellas que quedaron varadas en trenes o los residentes de hogares de mayores que dependían del oxígeno proporcionado por la Junta.
Además, compartió preocupaciones sobre las repercusiones económicas del apagón. Detalló que este incidente ha causado problemas en sectores como el ganadero, donde la interrupción del ordeño y el funcionamiento de cámaras frigoríficas está generando peligros para los productos perecederos. También aludió a la incertidumbre en torno a las subvenciones vinculadas al FOCAL, que suponen un apoyo económico vital, y que no pudieron tramitarse debido a las circunstancias del apagón.
Núñez concluyó su intervención haciendo un llamado a la responsabilidad y determinación por parte de las autoridades, instando a actuar con seriedad y compromiso en medio de la crisis actual.