VÍDEO: Morricone, Mozart y Vivaldi iluminan el Palacio de Congresos de Toledo con la Fundación Excelentia

El Palacio de Congresos de Toledo se convertirá en un escenario musical de renombre en los próximos meses, tras la firma de un convenio entre el Ayuntamiento de la capital regional y la Fundación Excelentia. Este acuerdo fue ratificado en un acto que contó con la presencia del alcalde de Toledo, Carlos Velázquez, y el presidente de la Fundación Excelentia, así como el responsable del Palacio de Congresos, César García.

Entre los eventos programados, destaca el espectáculo «Morricone y 100 años de cine», que se llevará a cabo el 26 de octubre. Posteriormente, el 23 de noviembre, se interpretará el Requiem de Mozart, y el 19 de enero será el turno de las «Cuatro estaciones» de Vivaldi. Las entradas están disponibles para la venta, con precios que varían entre 38 y 60 euros, dependiendo de la ubicación en la sala.

Cabe destacar que este convenio no genera ningún coste para el Ayuntamiento, ya que la Fundación Excelentia asume todo el riesgo financiero y no recibe subvenciones. Martí, representante de la Fundación, expresó su satisfacción por esta colaboración y subrayó el compromiso de la organización de llevar la música clásica a diferentes rincones de España y del extranjero.

César García, responsable del Palacio de Congresos, enfatizó la importancia de maximizar el uso de este recinto, que cuenta con 930 butacas, y destacó la positiva recepción del público toledano hacia este tipo de actividades culturales.

El alcalde, Carlos Velázquez, valoró la firma del convenio como un paso significativo para la vida cultural de Toledo. Afirmó que contribuirá a elevar la calidad y excelencia de la oferta cultural de la ciudad, alineándose con el objetivo de generar turismo de calidad. «Nos hemos propuesto ir a lo mejor», afirmó, añadiendo que este repertorio está a la altura de los mejores auditorios del mundo.

Velázquez también enfatizó la necesidad de construir una agenda cultural ambiciosa que no solo cumpla con la obligación de ser una ciudad Patrimonio de la Humanidad, sino que también destaque por su calidad y originalidad. «Aquí pasan cosas muy buenas relacionadas con la cultura, incluso extraordinarias y únicas», concluyó el alcalde, con la vista puesta en el objetivo de hacer de Toledo una capital europea de la cultura en 2031.

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