El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha decidido incrementar la seguridad en los estados costeros de La Guaira y Carabobo, una medida que responde a las recientes maniobras militares de Estados Unidos en el Caribe bajo la justificación de combatir el narcotráfico. Este nuevo despliegue, parte de la operación «Independencia 200», busca preservar la seguridad en áreas estratégicamente importantes para la nación, y ha visto la inclusión de milicias populares que provienen de meses de preparación.
Diosdado Cabello, ministro del Interior, ha enfatizado la importancia de estas maniobras afirmando que el objetivo es garantizar la protección de rutas marítimas, terrestres y aeropuertos, además de resguardar instituciones públicas. Durante el inicio de estas actividades en La Guaira, Cabello se ha manifestado enérgicamente, indicando que el pueblo venezolano se ha preparado para resistir la presión externa y sostener su soberanía.
La crítica hacia las acciones estadounidense no se ha hecho esperar. Cabello ha señalado que la lucha contra el narcotráfico es solo una fachada para implementar cambios de régimen en países hostiles a los intereses norteamericanos. Con un tono desafiante, ha afirmado que si realmente quisieran combatir el narcotráfico, deberían enfocarse en el Pacífico, donde el tráfico de drogas se dirige, según él, por manos aliadas de Estados Unidos.
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