Celebración del 50º Aniversario del Hospital Nacional de Parapléjicos: Un Pilar de Excelencia en Toledo
En un emotivo acto institucional, el Hospital Nacional de Parapléjicos (HNP), ubicado en Toledo, celebró su 50º aniversario desde su inauguración el 7 de octubre de 1974. La ceremonia contó con la presencia destacada del alcalde de Toledo, Carlos Velázquez, quien expresó profundo agradecimiento a los más de 700 profesionales que laboran en el centro. Velázquez destacó al HNP como un “referente de excelencia, de rigor y de investigación” en el ámbito de la sanidad española.
El alcalde subrayó la intención de continuar fortaleciendo los lazos entre el Ayuntamiento de Toledo y el hospital, afirmando que “queremos seguir siendo protagonistas de esta historia de éxito”. Con este objetivo, Velázquez prometió ampliar las colaboraciones en los ámbitos cultural y deportivo para fomentar una relación simbiótica entre la ciudad y el hospital. Proyectos como la proyección de películas en colaboración con el Festival del Cine y la Palabra Cibra, y actividades del Festival de Cine Social (Feciso), son parte de estos esfuerzos.
En el ámbito deportivo, la ciudad también se prepara para la I Carrera & Marcha Solidaria del Hospital Nacional de Parapléjicos, programada para el 27 de octubre. Estas iniciativas están diseñadas para ser inclusivas, permitiendo la participación de personas con lesiones medulares, en línea con la visión del alcalde de hacer de Toledo una ciudad verdaderamente inclusiva.
Velázquez también destacó las "aventuras deportivas" como el piragüismo adaptado para personas con discapacidad y lesiones medulares, con la esperanza de integrar pronto estas actividades en el río Tajo.
Durante el evento, se reconoció el trabajo invaluable de los profesionales del HNP. Velázquez se refirió al libro "Afrontando la lesión medular" de María Ángeles Pozuelo, psicóloga jubilada del hospital, que recoge testimonios conmovedores de pacientes, ilustrando cómo la labor del HNP trasciende sus muros y genera un impacto extraordinario en la vida de muchos.
El acto concluyó con un deseo compartido por muchos: que el Hospital Nacional de Parapléjicos continúe su legado de excelencia por otros 50 años más, manteniendo su estatus como un milagro humano y un orgullo para la ciudad de Toledo y España en su conjunto.
Estos 50 años de dedicación y cuidado han consolidado al Hospital Nacional de Parapléjicos como un bastión de esperanza y progreso para innumerables personas y un ejemplo inspirador para la comunidad médica a nivel nacional e internacional.