El juicio con jurado popular contra D.F.S., vecino de Navalcán (Toledo) acusado de estrangular a su vecina, una anciana de 84 años, ha comenzado en la Audiencia Provincial de Toledo. El acusado ha afirmado que se arrepentía de todo lo sucedido, ya que él «no es así», y ha manifestado que solo entró a robar, pero que la anciana se despertó y durante el forcejeo ella le golpeó, por lo que él «se rebotó» y le tapó la boca para que no gritara y, según ha alegado, después «dejó de respirar».
Para D.F.S., que se encuentra en prisión provisional y para quien la Fiscalía ha pedido 30 años de prisión, la acusación particular pide la Prisión Permanente Revisable. El acusado ha reconocido los hechos, pero ha asegurado que la anciana se defendió y las heridas fueron fruto del forcejeo, no de un ataque con un destornillador, como se ha denunciado. Según su versión, él entró en la vivienda de la anciana sin saber que estaba en la casa, para robar dinero ya que le habían amenazado con matarle a él o a su familia por no pagar unas deudas que tenía por la compra de droga.
El abogado de la defensa ha tratado de hacer llegar al jurado que el acusado estaba influenciado por la droga en el momento de los hechos y que actualmente está en un tratamiento de desintoxicación en la Fundación Atenea bajo supervisión de psicólogos. La defensa pide que se le condene solo por un delito de homicidio consumado, atenuando la situación por el arrepentimiento del acusado, el efecto de las drogas, y su promesa de usar el dinero obtenido para devolver la indemnización a la familia de la víctima.
D.F.S. está acusado del asesinato de M.P.M.M., mujer de 84 años con inicios de demencia senil. Una vez consumado el homicidio, el acusado produjo varias heridas al cuerpo de la víctima y dejó el cadáver encima de una cama. El juicio, previsto hasta el miércoles 19, continuará este martes con las declaraciones de los peritos forenses.
