En las últimas horas, la Asociación de Belenistas de Guadalajara ha sido víctima de un acto vandálico que ha dejado graves daños en sus instalaciones. Autor o autores desconocidos habrían entrado en el local en la madrugada del día 2, causando destrozos y sustrayendo diverso material, principalmente cable eléctrico. Además, se han roto varias figuras navideñas que estaban siendo preparadas para las celebraciones de Navidad.
La asociación ha denunciado los hechos ante las autoridades, aunque hasta el momento no se ha logrado identificar a los responsables. Este ataque ha generado una profunda preocupación entre los miembros de la asociación, quienes temen que los daños sufridos puedan afectar la inauguración de los belenes y exposiciones previstas para los próximos días.
Pilar Ruza, tesorera de la Asociación de Belenistas, ha manifestado su esperanza de que estos incidentes no repercutan en los plazos de apertura. Sin embargo, ha destacado que el vandálico ataque ha desmantelado gran parte del taller, donde fueron tiradas figuras y enseres, además de aplastar varias obras y vaciar muebles que contenían documentos y extintores. El principal obstáculo que enfrentan ahora es la pérdida total de las herramientas eléctricas, lo que podría impedir su utilización y complicar la culminación de los belenes.
Pese a que algunas de las obras que estaban siendo realizadas para el Ayuntamiento y la Diputación se encontraban cerca de su finalización en las casetas correspondientes, la falta de herramientas y el reducido tiempo disponible para trabajar han llevado a la asociación a cuestionarse las fechas de inauguración previstas. Sin embargo, Ruza se mantiene optimista y espera que, a pesar de estos contratiempos, puedan cumplir con los plazos establecidos.
Desde la asociación, se ha condenado rotundamente el ataque, al que consideran un atentado contra el patrimonio cultural. Este acto no solo ha dañado las instalaciones y materiales, sino que también ha generado un impacto emocional significativo en quienes dedican su tiempo y esfuerzo a mantener viva la tradición del belenismo en la región.
