En un claro reconocimiento al arte y la destreza en el mundo de la repostería, el alcazareño Jesús Quirós ha sido galardonado como el mejor maestro chocolatero de España en la competición Spanish World Chocolate Masters 2025. Este prestigioso certamen valora la creatividad, la técnica y la excelencia, colocando a Quirós en la cúspide del panorama chocolatero nacional, llevando el nombre de Alcázar de San Juan y de Ciudad Real a lo más alto.
Miguel Ángel Valverde Menchero, presidente de la Diputación de Ciudad Real, ha felicitado personalmente a Quirós. “Es todo un orgullo para vuestra pastelería y para toda la provincia”, expresó Valverde, resaltando que este triunfo personal también representa un logro colectivo. Según Valverde, este tipo de reconocimientos proyecta una imagen de calidad y excelencia desde lo local hacia el ámbito nacional, beneficiando a la comunidad entera y fortaleciendo el sentido de pertenencia.
La Spanish World Chocolate Masters se configura como uno de los concursos más exigentes y prestigiosos en el mundo de la repostería, seleccionando al mejor chocolatero del país en base a la innovación, el diseño y la armonía de sabores. Jesús Quirós, a través de sus propuestas, ha impresionado al jurado con un equilibrio perfecto entre las técnicas más avanzadas y la tradición que caracteriza su oficio. “Impecable”, fue una de las calificaciones otorgadas a su obra, cuyo enfoque busca ofrecer una experiencia sensorial completa.
Este reconocimiento destaca el potencial del sector agroalimentario y artesanal de la provincia, situando a la repostería como una importante embajadora del talento y la identidad local. Ciudad Real se consolida así como un referente en el ámbito de la gastronomía de excelencia, capaz de competir en los escenarios más exigentes. Al respecto, Valverde subrayó la importancia del talento local, vital para proyectar una imagen de una provincia activa y emprendedora.
Jesús Quirós, con su reciente hazaña, no solo eleva la reputación de su pastelería, sino que también contribuye al reconocimiento de Ciudad Real como una región rica en tradición y calidad culinaria, poniendo de manifiesto que el arte del buen hacer en la repostería puede ser un motor de orgullo y desarrollo para toda la comunidad.
Fuente: Diputación de Ciudad Real