El presidente de la Asociación de Usuarios AVANT del corredor Madrid-Ciudad Real-Puertollano, Pablo López, ha expresado su preocupación por el impacto que el robo de cable ha tenido en la operación de trenes, afectando a decenas de servicios. López ha señalado que, aunque la situación es comprensible y en cierta medida inevitable, es fundamental que tanto Renfe como Adif implementen un plan de contingencias para afrontar este tipo de incidentes imprevistos.
En sus declaraciones a los medios de comunicación, López ha vinculado esta problemática con el reciente apagón que también causó estragos en el servicio ferroviario. «No puede ser que ante cualquier incidencia la solución sea decir a la gente que se espere y que no se sabe cuándo saldrá su tren», ha afirmado, subrayando la necesidad de una mejor gestión de crisis por parte de las operadoras.
Respecto a la situación en la estación de Ciudad Real, que está recuperando lentamente la normalidad, el presidente de la asociación ha relatado cómo los usuarios se han visto obligados a lidiar con los problemas derivados de la imposibilidad de abordar sus trenes. «La gente está haciendo cola en las taquillas para conseguir un justificante que poder entregar en su trabajo. Una buena parte también de los usuarios habituales está solicitando teletrabajo y unos pocos están comunicándose por diferentes medios», ha detallado López.
Ante esta crisis, ha insistido en que es urgente establecer un plan de contingencias que permita a los pasajeros poder contar con soluciones efectivas y rápidas ante imprevistos como el robo de cable y otros problemas operativos que puedan surgir en el futuro.
