La final de «MasterChef Celebrity 10» se convirtió en una velada de emociones fuertes y momentos inolvidables que atraparon a la audiencia, reafirmando por qué el programa de TVE ha sido un fenómeno de seguimiento en el país. En esta gala decisiva, Mariló Montero se alzó como vencedora, dejando atrás a Miguel Torres, un exfutbolista que había conquistado los corazones de los espectadores durante toda la temporada.
La noche comenzó con una prueba emocionante en la que los cuatro finalistas, entre ellos Juanjo Bona y Torito, tuvieron la oportunidad de mostrar sus habilidades bajo la mirada atenta del prestigioso chef Virgilio Martínez. Mariló, con destreza y determinación, logró asegurar su paso al duelo final, mientras el Palacio Miramar en San Sebastián se convirtió en testigo de la lucha por la chaquetilla definitiva.
Miguel Torres, conocido por su cercanía y humildad, brindó un menú que no solo mostró su destreza culinaria, sino que también se transformó en un homenaje a su familia. Durante la presentación del postre, titulado “Mi hogar es mi pasión”, compartió con la audiencia lo que este plato significaba para él, desatando momentos de pura emoción. Las lágrimas afloraron cuando un pequeño accidente hizo que parte del postre se derritiera justo antes de ser presentado. En medio de la intensidad, Miguel se encontró abrazado a Mariló, ambos profundamente conmovidos, mientras su pareja Paula Echevarría también se dejaba llevar por la emoción desde la galería.
Al final de la gala, el jurado, más allá de centrarse en los detalles técnicos, puso en valor el viaje del exfutbolista. Jordi Cruz, con su característico enfoque directo y empático, le recordó a Miguel que no debía castigarse por un error que podría haberle pasado a cualquiera. Samantha Vallejo-Nágera destacó su espíritu solidario, y el chef invitado, Oriol Castro, no dudó en aplaudir tanto su técnica como la intención detrás de cada plato. Para él, el esfuerzo de Miguel merecía «toda la admiración del mundo».
Mientras tanto, Paula siguió emocionándose con cada valoración, y cada lágrima que brotaba de sus ojos resumía el amor y apoyo que compartía con Miguel. A pesar de su dolor por no haber alcanzado la perfección, el exdeportista agradeció sinceramente al jurado, dejando claro que su paso por «MasterChef Celebrity» había sido un camino lleno de aprendizajes y logros personales muy significativos.
La velada terminó con un claro reflejo de lo que el programa representa: no solo una competencia culinaria, sino un viaje humano donde la pasión por la cocina se entrelaza con el amor, la amistad y la superación. Mariló Montero se llevó la victoria, pero el espíritu de camaradería y apoyo entre todos los participantes dejó una huella imborrable en los corazones de los espectadores.
