Esta mañana tenía lugar la colocación en Ciudad Real de algunos adoquines del proyecto de alcance mundial “Stolperstein” concebido por el artista alemán Gunter Demnig para recuperar la memoria y restituir la dignidad de las víctimas del terror nazi. Consiste en instalar en las aceras de las casas donde nacieron o vivieron unos adoquines que indican fechas de su natalicio y por qué fueron asesinados. Se trata de una iniciativa auspiciada por “Mapas de Memoria” y la Diputación Provincial de Ciudad Real.
Esta mañana tenía lugar la colocación en Ciudad Real de algunos adoquines del proyecto de alcance mundial “Stolperstein” concebido por el artista alemán Gunter Demnig para recuperar la memoria y restituir la dignidad de las víctimas del terror nazi. Consiste en instalar en las aceras de las casas donde nacieron o vivieron unos adoquines que indican fechas de su natalicio y por qué fueron asesinados. Se trata de una iniciativa auspiciada por “Mapas de Memoria” y la Diputación Provincial de Ciudad Real.
Otros grupos políticos municipales del Ayuntamiento de Ciudad Real, en concreto el Grupo Popular y Unidas Podemos, han manifestado su claro interés por haber podido acudir a este acto, pero un problema de coordinación en la convocatoria se lo ha impedido ya que no tuvieron notificación.
A lo largo de 2022 se procederá a la instalación de 25 adoquines en Campo de Criptana, Arenales de San Gregorio, Ciudad Real, Miguelturra, Manzanares y Alcázar de San Juan. Nueve entre ayer y hoy, a los que habrá que sumar otros quince el próximo mes de mayo. Se trata de una idea de Gunter Demnig que ha sumado más de 1.200 pueblos y ciudades de Europa y Asia.
El Ayuntamiento de Ciudad Real ha tenido una amplia representación en el acto con la presencia de la primera teniente de alcalde, Pilar Zamora, la portavoz del equipo de gobierno, Mariana Boadella, el concejal de Mantenimiento e Infraestructuras, Casimiro Pastor, el concejal de Promoción Económica y presidente del IMPEFE, Pedro Maroto y la concejala de Acción Social, Matilde Hinojosa. Para Zamora “no desaparece lo que no se olvida, por ello desde la institución municipal agradecemos a la Diputación Provincial esta acción que es importante para que las cosas no desaparezcan, para que las generaciones futuras no dejen de tener presente este pasado tan atroz, esta dictadura, de gente que sufría torturas y el exterminio en los campos nazis”. Terminaba la edil diciendo que estos adoquines, que estarán situados junto a colegios e institutos, serán la prueba “para que cuando pasemos por encima de ellos no se nos olvide este terrible pasado”.
Los ayuntamientos pueden sumarse solicitando la instalación de adoquines en las casas donde nacieron o vivieron las víctimas, aunque también pueden hacerlo las asociaciones y colectivos o los propios familiares.